Seis síntomas depresivos en la mediana edad que podrían predecir la demencia

Investigadores del University College de Londres (UCL) han identificado seis síntomas depresivos específicos en la mediana edad que predicen el riesgo de desarrollar demencia más de 20 años después. Los hallazgos, publicados en The Lancet Psychiatry, sugieren que no todos los síntomas de depresión están asociados con la enfermedad neurodegenerativa, sino un conjunto concreto de ellos.

Los síntomas identificados son: pérdida de confianza en uno mismo, dificultad para afrontar problemas, falta de calidez y afecto hacia los demás, sensación constante de nerviosismo y tensión, insatisfacción con la manera de realizar tareas y problemas de concentración.

El estudio analizó a 5.811 adultos de mediana edad participantes en el estudio Whitehall II, iniciado en 1985, realizando un seguimiento durante 25 años mediante registros nacionales de salud. Durante este periodo, el 10,1% de los participantes desarrolló demencia, y el riesgo adicional se concentró exclusivamente en quienes presentaban los seis síntomas específicos. En particular, la pérdida de confianza y la dificultad para afrontar problemas aumentaron en aproximadamente un 50% el riesgo de demencia.

Según el doctor Philipp Frank, autor principal del estudio, "el riesgo de demencia está vinculado a un conjunto de síntomas depresivos, más que a la depresión en su conjunto. Este enfoque permite identificar décadas antes quiénes podrían ser más vulnerables".

El profesor Mika Kivimäki, coautor del artículo, añade que estos patrones matizados podrían conducir a tratamientos de salud mental más personalizados y efectivos, y subraya que no todas las personas con depresión desarrollarán demencia, ni todos los pacientes con demencia han tenido depresión previa.

Los investigadores destacan la necesidad de profundizar en cómo el tratamiento de la depresión en la mediana edad puede influir en la prevención de la demencia y de replicar estos hallazgos en diferentes poblaciones. Por ahora, prestar atención a estos síntomas podría ofrecer nuevas oportunidades para la detección y prevención temprana de la enfermedad.