Andrea Peláez, premio Embajadora de Zamora: "Me niego a dejar morir mi provincia, sin hacer nada, sin al menos intentarlo"
La periodista zamorana, que recogerá el galardón de los Premios Tierra de Zamora con motivo del Día de la Provincia, aprovechó su altavoz en la Cadena COPE para denunciar la injusticia que supone la supresión de paradas del AVE en la comarca de Sanabria
La voz, esa extraordinaria herramienta sonora para dar altavoz a las injusticias e informar de los acontecimientos que suceden cada día. Andrea Peláez, periodista de la Cadena COPE, destaca por una voz fuerte y firme que transmite convicción, también por la humildad con la que siempre lleva a Zamora, de la que se siente orgullosa cada día. La periodista zamorana ha sido reconocida como Embajadora de Zamora en los Premios Tierra con motivo del Día de la Provincia, que se celebrará el próximo 14 de junio en Villarrín de Campos.
Como uno de tantos zamoranos, Andrea emigró a la capital de España hace 15 años. El apego a su tierra se aprecia cuando tiene la oportunidad de alzar la voz ante el micrófono. Lo hizo recientemente frente al micrófono de la COPE para denunciar la supresión de paradas AVE en la comarca de Sanabria y también para poner al Zamora CF en el ámbito nacional. Tiene el don de la comunicación a través de la voz, y también el de conectar con jugadoras y oyentes.
¿Qué siente al ser nombrada embajadora de Zamora? ¿Qué significa este reconocimiento para usted a nivel personal y profesional?
Siento un orgullo enorme. No esperaba que se me reconociera en mi casa, que es lo más importante para mí, por parte de mi gente. Que se me reconociera de esta manera, después de haberme ido hace 15 años de allí… Es un premio que recibo con muchísimo cariño, con un orgullo tremendo. No sé si voy a recibir alguno más en mi carrera, pero este va a ser de los más especiales, porque no es por ningún mérito laboral: es una muestra de orgullo y de cariño que te entregan en tu tierra. Para mí, no hay mayor motivo de orgullo que recibirlo.
¿Qué es lo primero que cuenta de Zamora cuando habla de su tierra en Madrid?
La gente que tengo a mi alrededor, si había alguno que no conocía Zamora o que nunca había oído hablar de ella, ya le tengo la cabeza como un bombo de tanto hablarle de Zamora. Me dejo el alma hablando de Zamora: la maravillosa ciudad que tenemos, lo bien cuidada que está, el patrimonio que tenemos.
Y compruebo prácticamente cada año que la persona a la que le hablo de Zamora, y la visita, y se anima a ir, le encanta. “¿Cómo puede tener tan poca publicidad?”, dicen. Y es una pena que se conozca tan poco, con lo maravillosa que es.
Siempre hablo del románico de Zamora, de la Semana Santa, de la gente y, por supuesto, de la comida. Aquí, algunos compañeros de la redacción me piden chorizo cada vez que voy.
Recientemente alzó la voz ante los recortes de trenes AVE en Zamora. Como zamorana, es una situación que duele y es necesario denunciar.
Ya que no podía estar en la manifestación físicamente porque tenía que trabajar, era sábado, fin de semana de Tiempo de Juego, quería estar con mi gente y, sobre todo, intentar pelear por una causa que considero justa: que no se quiten los trenes a Sanabria ni a Zamora.
Era una forma de aprovechar el altavoz. Soy muy consciente del altavoz que tengo. A veces, por llevar tantos años en la radio, se te olvida que puedes llegar a rincones donde otros no.
Y siempre Paco González me lo dice: que tenemos el micro delante para que los oyentes se queden a gusto, pero que, de vez en cuando, podemos utilizarlo para quedarnos a gusto nosotros. Así que, sin dudarlo, le dije a Paco si me permitía utilizar unos minutos en antena para sacar la cara y poner voz a mi gente y a mi tierra. Y, por supuesto, me dijo que sí, sin dudarlo.
Además, es un fiel defensor de la España vaciada. Él nació en Asturias también. Estoy encantada de sentirme útil. Yo me fui hace 15 años, no cojo los trenes a Sanabria, no vivo allí, pero estoy constantemente pendiente de lo que necesita mi gente. Me niego a dejar morir a mi provincia, a mi ciudad, sin hacer nada, sin al menos intentarlo. Me salió del alma.
¿Cómo ha evolucionado su forma de comunicar desde sus inicios hasta hoy?
El periodismo ha cambiado mucho, sobre todo en la forma de hacerlo y de llevarlo a la gente. Estamos ante generaciones absolutamente nuevas de periodistas que utilizan medios distintos a los de antes. Cada vez vemos más la irrupción de las redes sociales, de plataformas como YouTube o Twitch, y ahí estamos, intentando adaptarnos.
Estoy a caballo entre la generación anterior y la actual, intentando aprender lo que puedo de esta nueva forma de hacer periodismo. Tiene beneficios, pero también carencias. Quizás había cosas en el periodismo de antes que eran mejores, como el tratamiento de la información. Ahora hay más periodismo de bufanda o incluso amarillismo, también en el ámbito deportivo.
Pero el mundo cambia, y todo tiene que cambiar con él, incluido el periodismo. No me disgustaba el de antes ni me disgusta el de ahora. Simplemente, hay que aprender y adaptarse a los tiempos que nos toca vivir.
¿Cuál es la parte más difícil de su trabajo y cuál es la que más disfruta?
Sin duda, la parte más difícil es dar noticias. Los periodistas estamos para eso, pero es complicado, primero por el volumen de profesionales que hay. Una de las cosas malas de este nuevo periodismo es que parece que cualquiera puede ser periodista: con un teléfono en la mano, grabas un vídeo y puedes llegar al mismo público que un periodista titulado. Creo que eso le resta mucho valor a la profesión.
Y eso hace que sea más difícil dar noticias, contar cosas nuevas, destapar lo que nadie conoce. Pero también es lo más bonito. Me siento súper realizada cuando doy noticias. Por ejemplo, con todo lo que ocurrió con las 15 futbolistas de la selección o lo que pasó tras el Mundial de Australia y Nueva Zelanda. Fue, sin duda, la época más dura de mi carrera, pero también la más satisfactoria. Tuve que bajar a las cloacas, recolectar información, contar cosas desagradables, pero la labor del periodista está en eso: contarle a la gente lo que no ve. Es lo más duro, pero también lo más bonito. Es lo que más disfruto.
Se declara seguidora del Zamora CF y hace unos meses se la vio por el Ruta de la Plata. ¿Qué nos puede decir de esta recién finalizada temporada y qué espera de la próxima?
Nos ha quedado ahí la miel en los labios. Ha sido un final de temporada un poco amargo, con esa plaza de play-off que se nos escapó, con esa plaza de la Copa del Rey que perdimos en la última jornada en casa. Además, se suma la despedida de Dani Hernández, el capitán del Zamora. Le vamos a echar muchísimo de menos.
Ha sido una gran temporada. Más allá del final amargo, hay que mirar de dónde veníamos. El Zamora estuvo en serio riesgo de desaparición: jugadores sin cobrar, una directiva ausente. Y, de repente, hemos armado un equipo, para mí, de los mejores de Primera Federación, con talento individual: Rafa Tresaco, Kike Márquez, Carlos Ramos… Un equipo que ha jugado como los ángeles. Le faltó un poco más de continuidad, quizá arrancar mejor la temporada, pero ha sido una temporada ilusionante.
Muy positiva para la ciudad. Porque engancharse al fútbol es engancharse a la ciudad, a lo tuyo. Que vengan aficiones, que nos movamos, también es darles vida a las ciudades. Estoy a tope con el Zamora y con lograr el ascenso el año que viene. Estoy muy en esas.
¿Qué jugador le ha sorprendido?
Rafa Tresaco. A Fermín ya le conocía, a Carlos Ramos también, por supuesto, pero de los nuevos, Rafa me ha parecido un jugador que puede hacer cosas grandes en el Zamora.
¿Qué espera de la Eurocopa femenina? Ha sido una lista ‘sin sorpresas’ sin Misa ni Jenni Hermoso.
Jenni no ha vuelto a la selección desde octubre de 2024. Misa Rodríguez, lo mismo. Con Jenni queda la espina de si esta es solo una decisión deportiva o si influye todo lo que ha vivido desde el Mundial. Es un error no tener a una futbolista como ella en la convocatoria. Tiene talento a raudales. La experiencia en estos torneos es un grado, y la vamos a echar de menos.
No sé si por edad estaría para ser titular en todos los partidos. Es verdad que es un campeonato corto, con muchos partidos en pocos días. Ya en los Juegos Olímpicos Montse Tomé no la consideraba titular. La usaba como revulsivo, pero cuando lo fue, fue de las mejores.
La ausencia de Misa Rodríguez me parece un poco más justificada. No está en su mejor momento. Aun así, la habría llevado como tercera portera, por experiencia. Para mí, Adriana Nanclares y Cata Coll están por delante, pero Misa también tiene su valor. Pero a Jenni Hermoso, sin ninguna duda, yo la habría llevado. Y espero que no nos arrepintamos de no tener a una jugadora de tanta calidad en Suiza.
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