Cerecinos comienza a reponerse tras la tensión y los cuantiosos daños de las inundaciones: "Hemos pasado mucho miedo"

Estos son los trabajos que realiza la Diputación, así como el mensaje de Faúndez para la CHD

Visita del presidente de la Diputación este lunes a Cerecinos
Visita del presidente de la Diputación este lunes a Cerecinos

La pequeña localidad de Cerecinos de Campos comienza a reponerse después de un fin de semana en el que se vieron sorprendidos por una gran inundación, tras desbordarse el arroyo de la Vega, que ha provocado cuantiosos desperfectos tras momentos de mucha tensión.

Y es que los vecinos se vieron sobrepasados por un escenario de lluvias torrenciales que cayeron en muy poco tiempo e incluso el nivel de agua subió por encima del sondeo, el sondeo se llenó de barro y el agua dejó de ser apta para el consumo.

En este sentido, el presidente de la Diputación, Javier Faúndez, ha resaltado que ya ayer domingo los operarios trasladaron hasta la localidad tres palés de agua y esta mañana se les han llevado otros dos palés, incidiendo en que desde la institución trabajan por los pueblos todos los días del año.

Además, una gran parte del pueblo, la parte baja, se inundó y hay mucho barro en las calles, un barro que está incrustado en el hormigón y que es muy difícil de quitar, habiendo comenzado ya a su limpieza. También hay un pequeño badén, un pequeño puente a la entrada, hasta donde la Diputación ha llevado otra máquina mixta para retirar vegetación y evitar así que si viene otra tromba de agua no se vuelva a producir este escenario.

También se encuentran en la zona tres camiones de bomberos del consorcio realizando labores de limpieza, así como un camión de la Diputación para retirar restos almacenados en el regato y un equipo de limpieza del parque de maquinaria con el objetivo de que entre hoy y mañana el pueblo quede totalmente limpio.

Por otro lado, Javier Faúndez ha querido transmitir un mensaje a la Confederación Hidrográfica del Duero: “Por aquí pasan muchos alcaldes que piden la limpieza de los regatos en zonas urbanas. Cuando vienen, los alcaldes conocen su pueblo y conocen la realidad, y cuando un alcalde te dice que hay que limpiar un regato es porque realmente tiene necesidad. Cuando lo solicitan a la Diputación, les digo que en el momento que tengan el permiso de la CHD al día siguiente tienen la máquina giratoria. Un organismo, ya que no hace su trabajo que es limpiar sus cauces y que lo podemos hacer otros gustosamente porque estamos más comprometidos con los ayuntamientos, que por lo menos emitan los permisos de forma preferente, no se puede estar nueve meses esperando un permiso para limpiar un cauce”.

Por último, Faúndez ha recordado que ha habido daños en la localidad, casas afectadas, una nave con 10.000 pollos que prácticamente han muerto todos, deterioro de maquinaria en el almacén del ayuntamiento… “A lo mejor no podíamos haber prevenido todo, pero la gente esta más tranquila si se previene, por lo que, ya que no lo hacen, que emitan esos permisos exprés para que podamos actuar en los meses de verano, que esos cauces están prácticamente secos”.

El alcalde de la localidad, Jesús Deza, ha asegurado que se pasaron momentos de mucha angustia. "El sábado se esperaban lluvias torrenciales. Pensábamos que no iba a llover, pero empezó a llover y no nos percatamos de la cantidad de agua que estaba cayendo. Lo cierto es que los primeros 50 litros fueron en 20 minutos y fue lo que provocó está inundación. No tenemos un paraguas para poder cubrir todo el pueblo cuando pasan estas cosas, pero el cauce está sucio. Pedimos hace meses la autorización de limpiar el cauce”.

El propio Deza apuntaba a esa falta de limpieza como la principal culpable: “Si estuviese limpio la inundación hubiese sido mucho menor. La inundación se metió en naves y en casas. EL agua entró en ocho, nueve casas, la gente protegió su vivienda, pero se adentró por los corrales. Hay cuatro naves afectadas, entre ellas una de 10.000 pollos que se han muerto todos porque cogió la nave medio metro de agua”.

El pueblo ahora trata de recomponerse tras vivir los peores momentos: “No es fácil cuantificar los daños, hemos pasado mucho miedo. Estuvimos toda la noche en vela con el teléfono en marcha. Estas cosas suelen suceder de noche, víspera de fiestas. Hemos estado en contacto permanente y ayudando a los vecinos que solicitaban ayuda y quiero agradecer a la Diputación los trabajos prestados, también recibimos la visita de la delegada, Leticia García”.

 

 

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