La Agencia de Noticias de Castilla y León celebró anoche sus bodas de plata con el compromiso renovado con el que nació: Colaborar en este gran proyecto que es Castilla y León y trabajar para poner en valor la diversidad de una tierra a la que enriquecen todos y cada uno de sus sus paisanos. “Aquella responsabilidad que adquirimos hace 25 años sigue vigente: seguimos embarcados en esta maravillosa aventura de crear complicidades entre nosotros; de asumir nuestra diversidad como una enorme riqueza y de poner en común lo mucho que nos une y nos hace grandes”, destacó el director de Ical, Luis Miguel Torres Chico.
La gala de celebración en el Centro Cultural Miguel Delibes, en Valladolid, estuvo arropada por representantes de todos los ámbitos de las nueve provincias, personas que encarnan los nombres y valores de ciudadanos anónimos por y para los que día a día este medio de comunicación abre una nueva jornada. Conducida por Torres Chico, y por la delegada de Salamanca, Yasmina Recio, la cita puso el punto de mira también en el viejo oficio que acompasa el día a día de este medio, cuya esencia también reside en la fotografía y la infografía, y en todos y cada uno de los profesionales que han pasado a lo largo de la historia por él. Entre ellos, los desaparecidos Fernando Peñalosa y Félix Ordóñez a quienes también se quiso rendir homenaje.
En el transcurso de la gala, el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, destacó tres realidades y lo que son a su juico tres valores de este medio de comunicación: la iniciativa emprendedora, el amor y el compromiso por el proyecto de Comunidad, y la apuesta por la innovación como “otras tres lecturas” que determinan un medio que nació como agencia y que hoy es un “auténtico centro de contenidos”.
Asimismo, en su intervención el jefe del Ejecutivo autonómico incidió en la valía del grupo de “visionarios” que en 1989 se puso de acuerdo para arrancar un proyecto que asistió en 2002 a su modernización con la adquisición del Grupo Promecal, y que “se parió aquí, por cabeceras de aquí y por profesionales que conocen esta tierra”. A estos últimos, les agredió el trabajo del día a día para acercar a los ciudadanos lo que pasa en su Comunida, y les felicitó por el acierto de premiar a un grupo de paisanos que detacan por valores actuales en la sociedad actual.
Compromiso humano
En ese guiño a la sociedad que le da sentido, Ical reconoció la labor de quienes han demostrado en sus diversos campos que desde esta tierra también es posible trabajar, contribuir y cumplir sueños. Por su calidad como hombres y mujeres en su día a día, la Agencia entregó los Premios Ical al Compromiso Humano a diez ejemplos que representan los valores de esfuerzo y trabajo por las personas, uno por provincia, y un Premio Especial que recayó en el 'escribidor', como le gusta que le llamen, José Jiménez Lozano.
El Premio Ical al Compromiso Humano por la provincia de Ávila recayó en Sara Escudero Muñoz, voluntaria de Cruz Roja, quien lleva más de 20 años cooperando con la organización, desde que recogiera el testigo de su abuela y de su madre. Ni su familia, ni sus propios hijos, de siete y tres años, le han impedido cumplir con su misión, la última la pasada Nochebuena en Filipinas. Mientras, por la provincia de Burgos, el galardón recayó en Dom Clemente Serna, quien fuera abad del monasterio de Santo Domingo de Silos durante 24 años, por abrir la institución a la sociedad y convertir la abadía benedictina en un espacio de debate cultural y social, así como de recogimiento y reflexión espiritual mundial.
En el caso de León, los profesionales de la Agencia otorgaron el reconocimiento al compositor y director de orquesta, afincado desde hace casi medio siglo en Villafranca del Bierzo, Cristóbal Halffter, por su gran compromiso ético y moral con la sociedad, que intenta mejorar a través de una mirada seria e integral a la cultura como compendio de todas las disciplinas artísticas. Premio que compartió, en el caso de la provincia de Palencia, con el arquitecto y humorista José María Pérez Peridis por su contribución a recuperar nuestra identidad a través del patrimonio cultural, y por su apuesta decidida para la formación de jóvenes que se especialicen en la conservación del patrimonio a través de escuelas taller.
El Premio Ical al Compromiso Humano por la provincia de Salamanca fue para el microbiólogo y director del Centro de Investigación del Cáncer, Eugenio Santos, por su compromiso con la investigación y la divulgación científica y su opción de trabajo desde su tierra natal, así como por su labor por una ética científica más estricta y por una opción por los jóvenes valores. Por la provincia de Segovia, el galardón lo recogió María José Frías, actriz y directora de la compañía Títeres de María Parrato, que pese a su juventud este año cumple tres décadas haciendo soñar desde el escenario a niños y mayores de medio mundo.
Por su parte, el doctor, investigador e impulsor de la Fundación Científica Caja Rural de Soria para el estudio y prevención de enfermedades degenerativas, Juan Manuel Ruiz, Liso recibió el reconocimiento por esta provincia por contribución a la divulgación de la dieta mediterránea como un estilo de vida y una de las mejores medicinas preventivas, y por su empeño para que la dieta mediterránea fuera declarada por la Unesco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Por la provincia de Valladolid, recogió el premio Ángela Bachiller, la primera persona con síndrome de Down en ocupar una concejalía, por ser ejemplo de tenacidad, integración y esfuerzo para normalizar la discapacidad, y convertirse en un referente para todo el colectivo al que da visibilidad desde su cargo público.
En el caso de la provincia de Zamora, el Premio Ical al Compromiso Humano lo recogió la científica María del Rosario Heras, jefa de la Unidad de I+D sobre Eficiencia Energética en Edificación del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat), por la dedicación de toda una vida profesional volcada en el desarrollo y divulgación de las posibilidades que ofrece la energía solar térmica y, en especial, por sus esfuerzos para avanzar en eficiencia energética.
Alegato al periodismo de provincias
El pensador, humanista, periodista y articulista de peso en España Jiménez Lozano fue el encargado de hablar en nombre de los premiados, como él mismo reconoció, por ser “costumbre consolidada” que la persona “más arrimada al ámbito periodístico y literario” se encargue de agradecer en nombre de todos las distinciones recibidas. Su discurso, no exento de crítica, fue un guiño a la “prensa de noticias”, que enmarcó en la misión en poner su vida en el empeño de comunicar la realidad, convirtiendo a los receptores de sus mensajes en sus iguales, “ya que les entrega todo lo que sabe, y todos necesitamos para estar conscientes de que vamos en la misma barca, y ésta es el destino humano”. “En cierto modo esto es lo que significa compromiso para todos nosotros, que es de manera singular con las gentes y los asuntos y los lugares que son los nuestros en esta tierra donde vivimos”.
El que fue director de Ical entre 2002 y finales de 2007 y uno de los artífices de la modernización de este proyecto, Rafael Monje Alonso, resumió la historia de una agencia de noticias que “lleva en su ADN la realidad autonómica. Que vio la luz seis años después del nacimiento de la propia Comunidad Autónoma. Una agencia que ha sabido en estos 25 años izar la bandera regional para ser la voz, los oídos y los ojos de los ciudadanos de Castilla y León”.
En su intervención, recalcó que “el territorio” siempre ha sido “nuestro cordón umbilical” sin renunciar a poner “una mirada fuera”. Además, destacó la “vocación de servicio” de este medio, “fiel testigo de la vida de Castilla y León y de sus gentes, sin olvidarse de los más desfavorecidos”.
Durante la gala los presentadores agradecieron la contribución de los distintos medios de comunicación de Castilla y León por contribuir a estos 25 años de historia de Ical, así como a los patrocinadores por apoyar la organización de este acto y la exposición ‘Ical, 25 años en imágenes’, una muestra itinerante que a lo largo del año recorrerá 16 ciudades de España y Europa y que habla del ayer y del hoy de Castilla y León y sus gentes.
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