El Pleno de la Diputación de este viernes ha estado marcado por la vuelta a la normalidad. Después de la sesión del mes pasado, en la que se ausentaron los cinco dimisionarios socialistas, la entrada de Alessandra Saba, Paulino Villar, Luis Segovia, José Luis Rodrigo y Jesús Ángel Antón en su lugar ha permitido que el PSOE vuelva a contar con sus ocho representantes habituales. Atrás queda ya, al menos desde el punto de vista institucional, la crisis interna que ha lastrado al grupo provincial durante las últimas cinco semanas.
De este modo, y aunque no estaba previsto de forma inicial, el Pleno ha comenzado con la ceremonia protocolaria de entrada de los nuevos diputados, que han prometido el cargo ante la atenta mirada de Fernando Martínez-Maíllo. El presidente les ha impuesto a todos ellos la medalla de la corporación y ha pedido a todos los presentes, en un tono distendido, que no se produzcan más dimisiones, pues la Diputación no cuenta con más distinciones de este tipo para entregárselas a sus hipotéticos sustitutos.
Así las cosas, se ha dado paso al orden del día ya con la presencia en la bancada de Alessandra Saba, concejal de Villanueva de Azoague; Luis Segovia, alcalde de Morales de Toro; Paulino Villar, concejal de Melgar de Tera; José Luis Rodrigo, concejal de Villardiegua; y Jesús Ángel Antón, alcalde de Pino del Oro. Los cinco han participado ya, con total normalidad, del proceso de debate y de las votaciones de los distintos puntos contemplados en esta sesión plenaria.
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