El concejal de Turismo, tranquilo porque en las aceñas de Cabañales “no se puede robar más”

Strieder respondía a la denuncia de UPL que lamentaba que las aceñas de Cabañales fueran uno de los lugares preferidos por los vándalos para delinquir. Además, el concejal de Urbanismo y Obras, Romualdo Fernández reconocía el escaso mantenimiento del puente de San Isidro a Valorio, aunque lo achacaba “al alto coste que supone el cambio de las tablas”.

 El concejal de Turismo, tranquilo porque en las aceñas de Cabañales “no se puede robar más”
El concejal de Turismo, tranquilo porque en las aceñas de Cabañales “no se puede robar más”

En las últimas horas, Unión del Pueblo Leonés recordaba que después de una inversión de dos millones de euros empleando fondos europeos, las aceñas de Cabañales se rehabilitaron y acondicionaron como centro de interpretación los molinos aguas arriba del puente de Piedra. Transcurrido ese tiempo, UPL denunciaba que se ha abandonado todo uso. “Con el tiempo, comenzaron a aparecer todos los vidrios rotos, incluso alguna ventana arrancada completamente. Siguieron otros actos destructivos, desde pintadas, a sustracción de los elementos lumínicos, lámparas interruptores y cables, rotura de las piezas sanitarias, existentes en la primera aceña, realizando peligrosos fuegos en el interior de los inmuebles y otras fechorías”, denunciaba UPL.

Ante eso, el concejal de Turismo, Cristoph Strieder, reconocía que “los daños no están siendo muchos”, y aseguraba que se encuentra tranquilo porque “no se puede robar más”. No obstante, explicó que la concejalía se encuentra inmersa en la puesta en marcha de un proyecto de intervención para incluirlas en la ruta de las aceñas que se está elaborando con fondos europeos.

Además, también en las últimas horas, el Partido Popular achacaba al equipo de gobierno la dejadez a la hora de dejar sin mantenimiento la pasarela entre el barrio de San Isidro y el bosque de Valorio. Una situación que reconoció el concejal del área, Romualdo Fernández: “Es cierto que hay una falta de mantenimiento. Hay que quitar vegetación, darle un pintado y cambiar algunas tablas”. Sobre la posibilidad de acometer esa mejora, el edil se escudaba en la dificultad de cambiar las tablas: “Es una pasarela que tal y como está construida no favorece al mantenimiento. Para poder cambiar las tablas hay que contratar una grúa, porque solo se pueden cambiar desde abajo, y eso conlleva un coste muy alto. Estamos valorando cambiar ese sistema para que el mantenimiento no sea tan caro”, explicaba.

También en este sentido, el alcalde respondía al PP: “No creo que la pasarela esté peor que hace dos años. Pero por las denuncias parece que se ha deteriorado ahora. Está bien que lo pidan, pero también tienen que ser consecuentes con cómo estaba hace dos años”, zanjaba.

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