Si Orpheus se acercase hasta Camarzana de Tera y viera, sólo por unos instantes, el estado en que se encuentra la villa romana bautizada con su nombre, la deidad no dudaría en sacudir de sus poltronas a todos los responsables de Cultura de la Junta de Castilla y León por permitir que las estancias de esta villa se hayan llenado de barro y no se pueda contemplar la joya de sus pavimentos, de sus mosaicos.
El barrizal domina los solados de las estancias de la villa romana a consecuencia de una tormenta caida el pasado domingo, pero parece que a la propietaria de la domus, de la villa tardoromana, a la Junta de Castilla y León, le importa bien poco que la situación permanezca durante días y días así. Los visitantes que llegan hasta la villa de Orpheus se asombran de cómo puede estar abierto al público en estas condiciones un recinto arqueológico de suma importancia en la historia.
Desde el Ayuntamiento de Camarzana de Tera, su alcalde Jaime Panizo se ha puesto en contacto con responsables de Cultura de la Junta y ha mantenido conversaciones con la Jefa del Servicio Territorial en Zamora que hasta ahora lo único que se ha hecho es enviar a la zona a un técnico para comprobar los daños. Las reclamaciones se suceden desde la alcaldía de Camarzana para que se intenvenga cuanto antes en la limpieza de los mosaicos y estancias llenas de barro. «Nosotros no podemos hacer esa limpieza, ya que somos meros gestores y la propiedad es de la Junta, además quien puede hacer esta limpieza es personal técnico», explicó a Benavente Digital y Televisión Benavente el alcalde, Jaime Panizo, visiblemente molesto.
El caso es que esta circunstancia se ha repetido en más ocasiones, con ocasión de fuertes precipitaciones de lluvia con tormenta, incluso el pasado año técnicos contratados por Cultura de la Junta procedieron a la retirada del material arrastrado por el agua, así como la limpieza de los restos musivos con el fin de que se pudiese volver a contemplar la belleza de esta joya romana.
La villa romana mantiene abiertas sus puertas a las visitas en horario de martes a sábado, de las 11:00 horas a las 14:00 horas, y los domingos desde las 11:00 horas a las 14:00 horas. Un calendario que se mantiene a pesar de la penosa situación en que se encuentra, que el barro haya cegado los magníficos mosaicos del pavimento de las estancias. Tanto el triclinium como el peristilo y resto de estancias de la villa evidencian la suciedad extendida por el conjunto de alfombras geométricas y polícromas de teselas de caliza y de pasta vítrea. El lodazal domina una singular estampa en los mosaicos de las heroínas griegas, del «Rapto de Europa», o los vestigios de la bella dama, del «Sueño de Ariadna».
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