La terraza del Teatro Ramos Carrión acoge este sábado y domingo la llamada 'Carpa de los oficios', un espacio que servirá de punto de encuentro para aquellos trabajos relacionados con el mundo del ovino. Sector de gran importancia para una Zamora que, con esta cita, busca reivindicarse y colocarse como capital de un ámbito que, Francisco Requejo, pretende impulsar definitivamente.
-¿Qué se van a encontrar quienes se acerquen a la ‘Carpa de los oficios’?
-Se van a encontrar un espacio con casos de éxitos empresariales. Va a estar la Escuela de bordados de Carbajales de Alba, expertos en pintura, escultura y lana, incluso va a haber una asociación portuguesa para que represente la confección tradicional de la lana en Portugal. Como aspecto novedoso vamos a contar con una tienda que va a representar la zona tradicional de descanso de los pastores.
-¿El objetivo de la Diputación es dar un espacio a estos sectores que han ido perdiendo peso?
-Queremos no quedarnos en el formato tradicional, sino presentar un programa completo en apoyo a las acciones gastronómicas que hemos hecho en restaurantes y de tapas. Especialmente queremos revalorizar a Zamora como tierra del ovino, hay que recordar que contamos con el IGP del lechazo y, sobre todo, que sea un referente en la cultura pastoril. La gente está respondiendo, hemos hecho actividades para niños y creo que va a ser un éxito para no perder nuestras tradiciones y raíces en torno a la cultura pastoril y el ovino que es el sector más importante que tenemos en Zamora.
-Hablando con profesionales de este sector, ¿qué le transmiten de su situación?
-Está complicado. Necesitan estímulos y ayuda, el tema del pastoreo está difícil y cada vez se ven menos pastores con el rebaño por la carretera que era una estampa habitual. Pero tenemos un sector ovino muy potente y si le ayudamos y estimulamos puede crear trabajo y fijar población. Contamos con 31 artesanos queseros que dan cabida a muchísima gente trabajando, Fromago fue una ayuda y un impulso importante para dar a conocer el sector lácteo en general y el quesero en particular, y demostró que en Zamora se pueden hacer las cosas bien en torno a una fortaleza como es el sector del ovino.
-¿Con esta iniciativa se busca dar un paso más allá y convertirlo en un acto de referencia a nivel nacional?
-Sí, ese es el motivo principal. Hemos empezado a cambiar el formato tradicional que teníamos por uno más innovador, hay que seguir apostando durante estos años. Hay que darlo a conocer que es muy importante para los niños y hemos empezado una actividad llamada ‘Cocinando cuentos’ para que a través de la cocina se acerquen al lechazo, también va a haber un concierto de música, la Carpa de oficios, las jornadas gastronómicas… Tenemos una materia prima de diez que, a lo mejor, no lo teníamos muy bien aprovechado y queremos referenciar a Zamora como capital del ovino. No queremos quedarnos en ese formato tradicional y buscamos un programa muchísimo más completo.
-¿Va a haber más sorpresas?
-Tenemos muchas cosas. Va a haber una mesa de la lana en el Teatro Ramos Carrión, un espacio de diálogo para expositores y empresarios; mesas redondas; y, entre otras cosas, va a haber un espacio para la ganadería del siglo XXI con cinco jóvenes que se dedican al sector y que explicarán su visión y sus experiencias profesionales y personales. Se ha hecho un gran esfuerzo y es un programa muy trabajado, por lo que animo a la gente a que conozca nuestra cultura pastoril.
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