Y es que la sociedad no está perdida, como se empeñan en repetir apocalípticamente muchas voces derrotistas y pesimistas. La cruda situación que atraviesa la sociedad hoy en día sirve para sacar lo mejor cada uno. El dinero, el poder y las influencias acaban por corromper a la gente, pero es en los momentos complicados cuando los individuos muestran su cara más solidaria para ayudar al prójimo.
El ejemplo claro de esto lo dan las organizaciones que utilizan tiempo y recursos económicos para auxiliar al de al lado. Uno de estos colectivos que ayudan a los que más lo necesitan es el Centro Menesiano Zamora Joven. Un centro que quiere ser la primera alternativa educativa válida y reconocida, que las familias, los jóvenes, las instituciones públicas y privadas, y la sociedad en general, contemplan en el desarrollo de acciones encaminadas a la integración social y/o laboral de jóvenes en riesgo y/o exclusión social, por su equipo educativo, por su modelo de gestión excelente, por su metodología y por los éxitos obtenidos.
Este trabajo no ha pasado desapercibido para la Diputación Provincial de Zamora y para el jurado de los premios “Tierras de Zamora”. Así, el portavoz del jurado, José Luis Prieto Calderón, explicaba tras el fallo de los premiados que el Centro Menesiano Zamora Joven recibía el ‘Premio Solidaridad’ “por su perseverancia en un campo tan necesario en nuestro tiempo y por la atención que vienen realizando en apoyo de los jóvenes en situaciones difíciles”.
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