“La provincia está viva y las movilizaciones no van a parar”: Faúndez lanza una advertencia a Renfe y al Gobierno

El presidente de la Diputación de Zamora, Javier Faúndez, se ha mostrado tajante tras la cancelación de la reunión previamente agendada con el presidente de Renfe, en la que se iba a tratar la supresión de varias paradas AVE en la estación de Sanabria. Finalmente, la reunión se celebrará esta tarde a las 16:45 en Madrid, una decisión que ha molestado en el seno de la Diputación.

“La actitud de Renfe es una falta de respeto. Los ciudadanos se tienen que sentir atendidos. Pido esa reunión para buscar soluciones; si luego se me da y luego se me quita, es perplejo. Vamos con buen ánimo, independientemente de que nos cuenten otra cosa”, ha apuntado Faúndez, visiblemente molesto ante una situación que ha colmado el vaso de la paciencia.

En este sentido, Faúndez ha enfatizado que la “provincia está viva” y que las movilizaciones no van a parar hasta que haya una solución. “Hay margen para poder negociar y rectificar”, ha asegurado, aunque ha reconocido que las esperanzas son escasas. Además, ha insistido en la unidad de la provincia frente a las decisiones del Gobierno y Renfe. “La respuesta de la provincia ha sido unánime”.

De esta forma, el presidente de la Diputación se desplazará hasta la capital de España con dos planteamientos. En primer lugar, se va a insistir en negociar. “Transmitiré el rechazo social que hay en la provincia, y ese rechazo va a ser creciente. Pienso que la provincia no ha estado tan unida en mucho tiempo”, ha apuntado.

Además, ha anunciado que se van a poner a disposición de los Ayuntamientos de la provincia autobuses gratuitos para acudir a la manifestación prevista este domingo en Zamora. De la misma forma, y para que se haga notar el hartazgo con la situación, desde la Diputación han propuesto el paro total de los comercios de la provincia durante cinco minutos. “Que se cierren supermercados, bancos y administraciones”, ha indicado. A lo que ha añadido que también se plantea una concentración multitudinaria en Madrid, delante del Ministerio de Transportes o bien delante de Renfe.

“No tiene ningún tipo de sentido si estamos hablando de recuperar población, si estamos hablando de utilizar la alta velocidad para asentar población. No se pueden tomar estas medidas por criterios comerciales y menos por una empresa pública”, ha defendido Faúndez, quien se ha preguntado: “¿Para qué se ilumina el Ministerio del Reto Demográfico si, a las primeras de cambio, tomamos medidas precisamente para seguir fomentando la despoblación?”

Con ello, Faúndez ha sido contundente: “No es cuestión de poner más plazas, es cuestión de poner plazas de tren cuando se necesiten. Lógicamente, el tren se utiliza como servicio público. Lo que planteamos es negociar la ida y vuelta en horario laboral”.