Como viene siendo habitual, las fiestas patronales de Tábara se clausuran con el reconocimiento al ganador del premio Internacional de poesía León Felipe del año anterior, así como la lectura del acta del ganador de esta edición.
El salón de actos de la Torre del Reloj de Tábara resultó insuficiente, para acoger a todas las personas que querían presenciar este evento que se está convirtiendo en una cita obligada, para los poetas que quieren abrirse camino en este difícil mundo de la poesía.
Al acto asistieron el alcalde de Tábara, Antonio Juárez, que presidió esta edición, Ángel Blanco, subdelegado del gobierno en Zamora, María Eugenia Cabezas, concejala de cultura del ayuntamiento de Zamora y Feliciano Ferrero, en representación de la Caja Rural de Zamora, que siempre se encuentra presente en las iniciativas que se hacen en esta tierra.
Paquita Gutiérrez, concejala de Cultura del Ayuntamiento de Tábara, ejerció como maestra de ceremonias, agradeciendo a todos los que habían trabajado en esta edición del premio de León Felipe, especialmente a la editorial Celya, que un año más es el principal artífice de esta edición, así como a Caja Rural de Zamora que apoya todos los eventos culturales que se realizan en nuestra provincia.
La concejala mostró el hartazgo por la situación que hemos pasado y a pesar de ser muy recientes los acontecimientos que la comarca de Tábara había padecido, era preciso mantener la celebración de este acto. Resaltó que nada ni nadie, nos harán perder nuestros orígenes y la gente de esta tierra, seguirá luchando por ella y ahora más que nunca, se hará por este espacio que ha quedado calcinado.
Antonio Juárez, alcalde de Tábara, comenzó su intervención dando el pésame a la familia de Eugenio Ratón, el último fallecido en su intento de controlar y sofocar los incendios que hemos padecido, así como su agradecimiento a todos los que colaboraron en la extinción del fuego
Quiso resaltar la importancia que tiene para estos pueblos la cultura y para el alcalde, acercarla a la sociedad, es una labor de todos los que ejercen un servicio público y deben realizar, mostrándose muy satisfecho, por el desarrollo que está teniendo esta iniciativa para el pueblo de Tábara.
Paula, Josina, Enar y Ruth, venciendo la timidez inicial que supone hablar frente a un numeroso público, recitaron algunos poemas del poeta de Tábara(Como aquella nube blanca, Ser en la vida Romero, Esta noche no hubo luna y Canción marinera) que fueron fuertemente ovacionados por el público asistente
Jesús Losada, uno de los promotores de este importante premio, presentó a Jesús Ferrero, un tabarés que quería resaltar al poeta de nuestra tierra, pero no haciendo un currículum que puede encontrarse en cualquier enciclopedia, él deseaba resaltar la parte poética y profética de este poeta sin patria y que a veces, resulta o se le considera inclasificable, pero para Jesús, el poeta León Felipe, fue un gran profeta solitario y un poeta que supo como pocos, exaltar la belleza que pueden encerrar las palabras.
El ganador de la anterior edición fue Julen Carreño, un licenciado en derecho, que con su obra Cansancio de materia, obtuvo el premio de la XX edición de poesía León Felipe. Julen, es master en neuropsicología y doctor en derecho, creció en San Sebastián y como el poeta, ha sido un permanente peregrino, viviendo en varios lugares del mundo y en la actualidad reside en Sevilla, donde trabaja como profesor de Filosofía Oratoria y Latín. Dejando a un lado su obra científica, entre sus producciones literarias, destacan los poemarios: La inquietud de las estatuas, Los pronombres relativos, De luces y sombras, Vigilias o Consagración del duelo. Ha obtenido varios premios de poesía en los diferentes certámenes en los que ha participado.
Cansancio de materia, es una obra trabajada, profunda, intensa, compuesta por unos poemas cuidados, cultos y afinados, donde cada metáfora ocupa su justo lugar y el autor va desarrollando una poesía en continua dialéctica sobre el paso del tiempo, sobre la fatiga de los materiales que nos conforman y constituyen, a fin de cuentas, lo que somos. El ritmo y la melodía de los textos, se juntan perfectamente al tema meditativo, filosófico y algunos momentos irónicos. Y no por ser un libro reflexivo, deja de tener el calor de la buena poesía, el toque de un lenguaje original y es un resumen merecedor de la atención para que el lector lo disfrute con tranquilidad y admire la maestría del autor que consigue hacer nuestros los poemas.
El ganador de la edición anterior, recibió el premio de manos del subdelegado del gobierno en Zamora, Ángel Blanco y del alcalde de Tábara, Antonio Juárez y dirigió unas palabras a los presentes, hablando sobre la obra merecedora de este premio y al final del acto, firmó ejemplares para todos los asistentes de la obra premiada
Para la edición de este año, se han recibido trabajos procedentes de todos los rincones del mundo. Del total de los 512 poemarios, el 68% han sido recibidos desde España y un 32% desde el extranjero. De los poemarios presentados desde España: De Comunidad de Madrid (24%), Andalucía (18%), Cataluña (13%), Comunidad Valenciana (9%), Castilla y León (8%), Castilla-La Mancha (6%), Murcia (3%) y resto de comunidades autónomas (19%).
De los poemarios presentados desde el extranjero: De Argentina (12%), Colombia (11%), Cuba (7%), EE.UU (6%), Chile (6%), Ecuador (4%) y el resto, un 45%, desde Costa Rica, Egipto, Francia, Israel, Italia, Marruecos, México, Nicaragua, Perú, Portugal, Puerto Rico, Reino Unido, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.
Seguidamente, se procedió a dar lectura del acta del Jurado que ha formado parte de esta edición:
Reunido el Jurado del XXI Premio Internacional de Poesía LEÓN FELIPE convocado por el Excelentísimo Ayuntamiento de Tábara, lugar de nacimiento del poeta León Felipe, y por la editorial CELYA en colaboración con la Fundación Caja Rural de Zamora, el jurado estuvo presidido por Antonio Juárez Núñez (alcalde de la villa de Tábara) y por Francisca Gutiérrez del Río (concejal de Cultura), y compuesto por los siguientes poetas ganadores de convocatorias precedentes: Enrique Villagrasa, Santiago Sastre, Boris Rozas y Julen Carreño, así como por la profesora y poeta María Antonia Ricas Peces, por Joan Gonper -gerente de la editorial CELYA- y por el profesor y poeta Jesús Losada, ambos como co-directores de este premio, acuerda otorgar por mayoría el Primer y único premio al libro Nº 507 de los 512 trabajos poéticos presentados al certamen, cuyo título obedece a:
ENTRA LA NOCHE
que una vez abierta la Plica resulta corresponder a:
MARINA CASADO HERNÁNDEZ
El Premio consiste en la edición del libro ganador, la donación de 100 ejemplares del libro, y la entrega de Diploma y Trofeo, y se hará efectivo durante el mes de agosto de 2023.
Con una original y elaborada mezcla de prosa poética, a modo de introducción de algunos poemas, y versos con un ritmo interno cuidado, Entra la noche nos presenta una serie de textos donde temas universales como el pasado que aún arde, la muerte, las pérdidas, la despedida de la infancia, etc., están tratados desde imágenes líricas muy personales, pero también muy acertadas. Un libro de lenguaje intenso, confesional y reflexivo, íntimo y a la vez cercano a las preguntas cardinales de la filosofía. Entra la noche es un conjunto de poemas de acabado impecable, de gran maestría literaria, sin perder, por ello, el carácter estremecedor y nocturno que la auténtica poesía preserva.
Como conclusión de este acto, Iván Escudero al contrabajo y Patricia Guerreira y Lucía Urones al violín, interpretaron un repertorio de algunas obras de los clásicos y de autores más actuales.
Sin duda, un gran broche final, para este intenso y cada vez más interesante programa, de un premio que cada año cuenta con una participación más importante y numerosa.
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