La plataforma Stop Biogás acusa a los responsables del proyecto de omitir detalles clave sobre la planta de biogás

"Sobre las cantidades de dinero que prometen para el pueblo, conocemos que en el caso de alguna otra localidad con planta de biogás ya instalada, los impuestos que finalmente reciben son ridículos", denuncian

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Vecinos salen a la calle para manifestarse en contra de la instalación de la planta de biogás en Santibáñez de Vidriales
Vecinos salen a la calle para manifestarse en contra de la instalación de la planta de biogás en Santibáñez de Vidriales

La Plataforma Stop Biogás Zamora y Stop Biogás Cubo del Vino han lanzado duras críticas tras la charla ofrecida ayer por la empresa Biorig a los vecinos de El Cubo de la Tierra del Vino. Según las plataformas, las promesas sobre los beneficios de la planta de biogás proyectada estuvieron plagadas de omisiones y contradicciones que podrían tener graves repercusiones para el medio ambiente y la calidad de vida de los habitantes de la zona.

“Lagunas” en los compromisos de Biorig
La Plataforma Stop Biogás denunció que, aunque Biorig aseguró que los residuos se recogerían en un radio de 25 km, esto no sería viable debido a la escasez de residuos ganaderos en esa área. “O traerán los residuos de más lejos o fomentarán la creación de macrogranjas en la zona”, advirtió la plataforma.

Además, criticaron la afirmación de que no habría emisiones tóxicas de la planta. “Pese a que los expertos medioambientales alertan sobre la emisión de gases nocivos, Biorig ‘dio su palabra’ de que no ocurrirá”, señalaron los portavoces de Stop Biogás.
Stop Biogás también puso en entredicho la información presentada sobre los materiales que manejará la planta. Aunque Biorig habló de purín, estiércol y paja de maíz, en su proyecto figuran otros elementos como lactosuero y restos de industria agroalimentaria. “Insisten en que no procesarán residuos urbanos, ni aceites, ni lodos, pero sus palabras no coinciden con los datos de su proyecto”, recalcaron.

En cuanto a los residuos generados, la empresa comparó el tamaño de la balsa necesaria con la de una granja pequeña. Sin embargo, Stop Biogás destacó que el proyecto contempla una balsa de 34.000 m³, “muy lejos de lo que dijeron durante la charla”.
Otro aspecto que preocupó a la plataforma fue el transporte de los residuos. Aunque Biorig afirmó que los vehículos serán herméticos, Stop Biogás advirtió sobre posibles accidentes y los olores que generarían tanto el transporte como los residuos procesados. “El impacto ambiental y el mal olor afectarán no solo a El Cubo, sino a toda la comarca”, subrayaron.
Biorig habló de beneficios económicos para el pueblo y aseguró que no solicitarán subvenciones públicas. Sin embargo, la plataforma desconfía de estas afirmaciones. “En otros municipios, los impuestos recibidos han sido ridículos en comparación con lo prometido. ¿Por qué rechazan subvenciones de hasta 15 millones de euros? Tampoco dieron explicaciones claras sobre esto”, plantearon desde Stop Biogás.

En un mensaje final dirigido tanto a las autoridades como a la empresa, Stop Biogás fue tajante: “¡Dejad ya de infravalorarnos! ¡Zamora no se vende!”. Las plataformas reiteraron su compromiso de seguir luchando para proteger el territorio y a los vecinos de proyectos que consideran perjudiciales.

"La empresa defiende la viabilidad y los beneficios de la planta de biogás proyectada en El Cubo de la Tierra del Vino"

Entre los aspectos aclarados, la empresa subrayó que la planta no procesará residuos urbanos, aceites ni lodos, como se había sugerido en algunas críticas, sino que se limitará al tratamiento de purín, estiércol y paja de maíz provenientes de la ganadería local. También desmintieron las afirmaciones sobre el uso de residuos de la industria agroalimentaria, asegurando que no forman parte del proyecto.

En cuanto a los temores sobre las emisiones de gases contaminantes, Biorig negó rotundamente que se produzcan emisiones tóxicas. Aseguraron que la planta cumplirá con todas las normativas medioambientales vigentes y garantizó que no se liberarán sustancias nocivas a través de las chimeneas de la instalación.

Además, sobre las preocupaciones acerca del transporte de los residuos y los posibles vertidos, la empresa explicó que los vehículos que transportarán los desechos estarán totalmente sellados, minimizando cualquier riesgo de derrames. También abordaron las críticas sobre los olores generados, asegurando que el sistema de almacenamiento y procesamiento de la planta estará diseñado para controlar y reducir al máximo cualquier impacto olfativo.

Respecto a la balsa de almacenamiento, la empresa precisó que será de dimensiones adecuadas a las necesidades de la planta y que el proyecto cumple con todos los requisitos técnicos para garantizar una correcta gestión de los residuos generados.

Por último, Biorgi desmintió las acusaciones sobre la solicitud de ayudas públicas, reiterando que no solicitarán subvenciones, lo que, según la empresa, demuestra su compromiso con la viabilidad económica y la sostenibilidad del proyecto. Aseguraron que los recursos serán invertidos de manera directa en la mejora de la comunidad, destacando los beneficios económicos para El Cubo de la Tierra del Vino.

 

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