VÍDEO | El olvido de la tragedia de la Sierra de la Culebra en Santibáñez de Tera: “Nos han prometido algo que no están cumpliendo”

Las ayudas para los damnificados no han llegado a las tres explotaciones de ganadería intensiva ubicadas en esta localidad, sintiéndose olvidados por las instituciones meses después de que las llamas arrasasen con todo a su paso

Las llamas arrasaron en la zona
Las llamas arrasaron en la zona

El color negro y el olor a humo. El sentido de la vista y el del olfato. Dos cambios en el paisaje de una Sierra de la Culebra que vivió la peor cara del verano: los incendios. Las llamas se propagaron por la zona con velocidad el 15 de junio y tuvieron en jaque a la provincia durante 72 días.

Evacuados, terreno dañado, temor y animales atrapados por los distintos focos. Esa fue la situación que lamentaron miles de personas a lo largo y ancho de Zamora desde el momento en el que las llamas aparecieron. Un color anaranjado que se vislumbraba desde cientos de metros, dejando una extensa columna de humo que llegó a poder verse desde rincones diversos.

Con el paso del tiempo, la situación ha podido irse restaurando con mayor o menor normalidad, si bien los daños sobre el terreno y en la fauna y flora siguen estando presentes, tardarán en recuperarse. Pero hay otros como la pérdida de trabajos que también dejan problemas en algunas localidades concretas como es el caso de Santibáñez de Tera.

En dicho lugar había tres explotaciones de ganadería intensiva que de un día a otro se vieron arrasadas y con todo perdido. Es el caso de la Ganadería Pilarica, gestionada por Pilar Álvarez, quien perdió 600.000 kilos de paja.

Imágenes de las llamas en la zona

Durante las dos primeras semanas recibieron ayuda a través de un camión cargado de este material y con la mitad de la carga de otro. Después, solo llegó un camión más con paja el 8 de agosto. Ayuda escasa para una ganadería que perdió “toda la paja del año” y que, ante los cantos de sirena de posibles ayudas tras la tragedia, no hicieron un aprovisionamiento de cara al invierno.

Sin embargo, los problemas no han cesado al ver como han sido excluidos de las ayudas marcadas por las instituciones. “Las ayudas no contemplan a las ganaderías de intensivo, que somos las tres de aquí, de Santibáñez de Tera, al considerar que a raíz del consumo que requerimos nos llevaríamos casi todo el dinero destinado a estas partidas”, apunta Álvarez.

Ante esta situación, todos ellos han alzado la voz y, a través de su propio Ayuntamiento, han buscado que la realidad cambie y puedan ser incluidos. Y es que, tal como expresa esta ganadera tienen claro que no están “pidiendo nada que no sea justo“.

Por ello han mantenido reuniones con distintos representantes políticos, buscando alternativas y ser tenidos en cuenta para hacer frente a una tragedia que azotó a la provincia y que sigue coleando. Una tragedia contra la que se ven atados de manos al haber recibido promesas “que no están cumpliendo”.

Por ahora, la única respuesta recibida han sido palabras de que se buscará crear una posible línea de ayuda que tenga en cuenta a este tipo de ganaderías. Palabras que, por el momento, no han terminado en nada concreto y mantienen a estas tres explotaciones fuera de la lista de damnificados que han sido atendidos para hacer frente a la desgracia.

El fuego amenaza la ganadería Pilarica de Santibáñez de Tera

 

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