Los vecinos de los distintos municipios de la Sierra de la Culebra despiden entre aplausos a los efectivos de las distintas BRIF que durante estos días han luchado a destajo día y noche para sofocar un incendio que lamentablemente ha calcinado más de 30.000 hectáreas.
Con la próxima llegada del nivel 0 de peligrosidad, los distintos efectivos van poco a poco retirándose a sus bases, desde las que han acudido al auxilio de los zamoranos.
En este devastador incendio, recordemos que varios municipios tuvieron que ser desalojados bajo la incertidumbre de si las llamas llegarían en algún momento a sus casas, algo que se ha podido evitar en gran medida gracias a la labor de los equipos de extinción que a pesar de las condiciones precarias en las que desarrollan su actividad, han desarrollado largas jornadas de trabajo hasta el límite de sus fuerzas para evitar una catástrofe de mayores dimensiones.
Una imagen, la de los vecinos despidiendo a sus héroes que contrasta mucho con el recibimiento que dieron los mismos a los representantes institucionales de la Junta de Castilla y León, que fueron despedidos bajo una sonora pitada y otras lindezas.
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