El nombre de este vino, evoca un periodo de la historia de estas tierras, situadas entre el río Tormes y el Duero, cuando formaban parte del mítico reino de Sabaria. Tras la caída del Imperio Romano de Occidente y la ocupación de la península por las tribus bárbaras, este reino gozó de cierta autonomía. Rodeado por los Suevos y los Visigodos, las gentes de Sabaria luchaban por mantener su identidad e independencia, como ya lo hiciese seiscientos años antes Viriato, su más ilustre antepasado. Aquel reino, cuya capital pudo estar situada en Peñausende, y que llegó emitir moneda propia, fue finalmente conquistado por el rey Visigodo Leovigildo durante una de sus campañas contra el reino vecino de los Suevos. Conocemos su final gracias al Chronicon de Ioannis Biclarensis, escrito en el siglo VI, evitando así, que el nombre de Sabaria desapareciera para siempre en la oscuridad de noche de los tiempos.
Desde la frontera más occidental de aquel reino, en Fermoselle, también conocido como el pueblo de las mil bodegas, sus descendientes han querido recoger el valor y el amor a la tierra de sus antepasados, arañando a la tierra de Sayago sarmientos y vides, silencios de aire recio, uvas y vientos arribeños en un pasional homenaje a sus orígenes con esta nueva referencia de vino en el mercado.
Estos jóvenes descendientes de Sayago han blandido su mejor arma y homenaje a su tierra, empeñados en mantener la identidad de un territorio que aman profundamente. Así han materializado un tinto monovarietal de uva bruñal, que hará las delicias de esta tierra enhebrada en Arribes del Duero, que no se resigna a ser olvidada. La Bodega Pardal y Punto está siendo puntera en la recreación etnográfica de lo suyo y de los suyos, tratando con mimo y exquisita sensibilidad este nuevo hijo que ha parido Sayago y que ya ha tenido una excelente acogida de su hermano mayor Salsipuedes, (en homenaje al desaparecido pueblo de Argusino), reconocido con una buena nota de cata en la guía Peñín y premiado recientemente con el Arribe de plata en el concurso internacional Vinduero- Vindouro.
El carácter indómito de la ancestral Sabaria se infiltra en las venas de estos sayagueses que no se dan por vencidos, meciendo sarmientos, acariciando paisajes que duelen por su belleza cautiva, la esencia de lo pequeño embotellada para el deleite de todos los que amamos Sayago.
Este nuevo retoño, acunado desde la vid, mimado en la barrica y reflejado en un cuidado diseño del premiado Javier Garduño, posee un color cereza de capa oscura con un aroma a fruta negra madura, ciruela pasa y mermelada de zarzamora, con notas cremosas y especiadas, voluminoso, graso y jugoso. En boca es amplio con una compleja expresión frutal y extraordinaria elegancia. Sabaria ha sido elaborado con una selección de las mejores uvas de bruñal reposando en barrica de roble francés durante doce meses hasta su embotellado.
Sayago renace en Sabaria, sangre tinta de su bruñal hecha verso, memoria escarbada en tierra de un pasado, que será futuro al abrigo de la madre tierra de Sayago y de sus hijos.
Un vino homenajea a la comarca de Sayago
‘Sabaria y Punto’ es el nombre elegido por la Bodega Pardal y Punto ubicada en la localidad zamorana de Fermoselle, para dar a conocer al gran público su nuevo vino, perteneciente a la Denominación de Origen Arribes.
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