Zamora volvía aconvertirse en protagonista de la pequeña pantalla el pasado martes con laemisión del programa de MasterChef grabado en la capital. Un episodio que dejógrandes momentos como la elección del primer finalista o la primera vez que sedecidió no expulsar a ningún concursante.
Un programa cargado desorpresas, pero, sobre todo, de encanto zamorano. Las imágenes de la Catedral,la elaboración de grandes platos con productos zamoranos y el patrimonio de lacapital fijaron la atención de un más de un millón de personas, en concreto1.650.000 espectadores, que la noche del pasado martes no se separaron deltelevisor y pudieron conocer más en detalle esta ciudad y la calidad culinariade toda la provincia.
Los datos de audienciamuestran una bajada del 4% respecto al anterior programa, pero MasterChef sigueen el top 5 de la noche de los lunes. Sin duda, una ligera bajada para elprograma culinario, pero una gran oportunidad que Zamora aprovechó para encandilaral millón y medio de espectadores.