Los caprichos meteorológicos hicieron que la capital zamorana recibiera ayer, entre las 11.45 y las 11.59 horas, una de las mayores acumulaciones de lluvia de 2014, con quince litros por metro cuadrado, lo que redujo rápidamente la temperatura a apenas 16 grados durante unos minutos para acentuar después una sensación de bochorno que la Agencia Estatal de Meteorología reflejó en su página web.
En la impresión de esa página, concretamente, en el apartado de previsión por horas que recoge zamora24horas puede verse la línea superior, que indica una sensación térmica de 32 grados y que, poco antes, había alcanzado los 37.
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