La ayuda vecinal permite identificar a los vándalos que causaron destrozos por más de mil euros en una localidad zamorana

El Ayuntamiento de Benavente informa que en la tarde de ayer dos menores de edad  fueron identificados por la Policía Local como los autores de un incendio en un  contenedor de papel en el entorno de la Plaza Virgen de la Vega que obligó a desplazarse  a los Bomberos del Parque de Benavente para sofocar el fuego. Gracias a la colaboración  ciudadana que permitió identificar a los autores, la Policía Local ha tramitado el correspondiente expediente sancionador notificándose a sus tutores ya que se trata de menores de edad. 

El Ayuntamiento de Benavente ha trasladado el informe al Consorcio Provincial de  Residuos para la evaluación de daños sufridos en el contenedor afectado, una cantidad  cercana a los 1.000 euros que deberán ser abonados por los autores del incendio, que a su  vez deberán abonar los costes de la salida y actuación de los bomberos del Parque de  Benavente. Desde el Ayuntamiento de Benavente no se descarta llevar este caso ante la  Fiscalía por la peligrosidad de los actos que gracias a la rápida intervención no generó  mayores consecuencias. 

A su vez, desde el Ayuntamiento de Benavente se ha abierto el expediente sancionador a  los cuatro autores de las pintadas sobre el mural de Miguel Delibes ubicado en la fachada  del Centro Cultural Federico Silva que fueron identificados por la Policía Local gracias a  la colaboración ciudadana. Los autores de las pintadas, tres menores de edad y uno mayor  de edad, se enfrentan a una sanción económica de entre 301 y 750 euros por  incumplimiento de la Ordenanza Cívica, siendo intención municipal aplicar la máxima  sanción posible. 

Desde el Ayuntamiento de Benavente quieren hacer un llamamiento a la colaboración  ciudadana, ya que ha quedado demostrado, que la colaboración de los vecinos ayuda a la  identificación de los autores atentan contra los bienes comunes de manera incívica y en  ocasiones de manera peligrosa. A su vez, hacen un llamamiento al cese de actividades que dañan los bienes comunes de la ciudad y que pueden poner en peligro la integridad de los vecinos.