El pasado 15 de junio una tormenta desató el desastre en la provincia de Zamora. Alrededor de las ocho de la tarde dos focos, uno en Sarracín y otro en Ferreras de Abajo, gestaron el que sería el peor incendio forestal de la historia de la provincia y siendo el segundo más grave del siglo XXI en España, por detrás únicamente del de Minas de Riotinto en 2004 en Sevilla y Huelva.
Un mes más tarde, el incendio sigue sin darse por extinguido y se mantiene aún en controlado tras arrasar más de 30.000 hectáreas de superficie en una Sierra de la Culebra que agoniza aún tras vivir su peor incendio.
El fuego se originó a consecuencia de una tormenta, y germinó en un contexto poco favorecedor ya que el operativo de incendios no se encontraba aún activo ya que se produjo antes del uno de julio. Fueron 96 horas de horror con un incendio que llegó a estar " fuera de capacidad de extinción" y que obligó a desalojar a más de una veintena de localidades.
Tras estabilizarse, llegó la hora de hacer balance cuando el domingo 19 de junio los zamoranos desalojados pudieron volver a sus viviendas. Treinta días después, pasar el cruce de Litos es cruzar la frontera a una de las páginas más catastróficas de la crónica zamorana.
El negro lo cubre todo y Otero de Bodas recibe a sus visitantes con un paisaje que hace difícil de olvidar el horizonte cargado de humo y de color rojo que hace solo apenas un mes que ha servido para que el miedo diese paso a la devastación y la devastación a una corriente de rabia y lucha que se tradujo en un movimiento social sin precedentes en la historia reciente de Zamora.
Sin embargo, si alguien ha sido protagonista durante este último mes esa ha sido la solidaridad. Toda la provincia ha abanderado la lucha por recuperar la sierra ya fuese a través de difusión, de ayuda económica, de reparto de alimento para los animales salvajes...
También han surgido plataformas como 'La culebra no se calla'. precursora de la multitudinaria manifestación que tuvo lugar el pasado 21 de junio y que este viernes, cuando se cumple un mes, tendrá lugar una nueva movilización en Ferreras de Arriba para que el olvido no se entremezcle con las cenizas que aún tiñen la Sierra de la Culebra.
Una plataforma que ha servido además para ofrecer información de los puntos oficiales de ayuda así como de los diferentes canales a través de los cuales la población podía brindar su granito de arena con la zona y los vecinos afectados.
Pese a ello, no solo habrá que esperar décadas para que la sierra vuelva a lucir en todo su esplendor, si no que los habitantes de esta zona sufrirán muchos más años hasta que puedan olvidar esta tragedia.
Lo más inmediato será el plan de reforestación de la zona, la saca de madera quemadas y las ayudas para paliar el daño socioeconómico en la zona.
La sierra ha sido también muestra en este tiempo de que la vida se abre paso pese a todo, con muestras de que ya se dan algunos brotes verdes en la zona, y como los animales que han sobrevivido, aunque aún desorientados, buscan entre las cenizas recuperar lo que queda de su hogar.
A la espera de que la Junta de por extinguido el incendio en la zona cero, tras sufrir hasta cinco reactivaciones desde que se diese por controlado, este es el balance un mes después de que una tormenta convirtiese la Sierra de la Culebra en un escenario infernal.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios