La Policía Local y el Parque de Bomberos de Benavente atendieron este miércoles varias intervenciones destacadas relacionadas con seguridad ciudadana, emergencias médicas y altercados públicos.
Entre los hechos más llamativos del día, una pelea entre dos ancianos ebrios en la calle Eras a las 21:03 horas obligó a movilizar a una patrulla policial. Según fuentes municipales, ambos implicados se encontraban visiblemente alterados, y uno de ellos tuvo que ser atendido por los servicios médicos tras caer al suelo. El conflicto generó gran expectación entre los vecinos de la zona.
La jornada comenzó temprano con un aviso a las 09:33 horas por la desaparición de una mujer con Alzheimer, que fue localizada poco después en buen estado gracias a la colaboración ciudadana. A las 10:32 horas, una señora de 90 años sufrió una caída en la calle Francos y fue trasladada al Hospital de Benavente.
A las 14:01 horas se produjo un derrame de gasoil en la calle Zafra, que afectó a varias calles cercanas, incluyendo Catalanas y parte de la avenida Luis Morán. La intervención de los Bomberos fue clave para contener el vertido con sepiolita, evitando riesgos para los vehículos. La fuga fue causada por una avería en un camión grúa.
En el mismo momento, se registró una colisión entre un camión y un turismo estacionado, aunque la situación se resolvió mediante parte amistoso.
Minutos después, a las 14:28, la policía recuperó un perro extraviado y logró localizar a su dueño, un pastor de la zona, gracias a la lectura del microchip.
Otra actuación relevante tuvo lugar a las 20:10 horas en una gasolinera Star Oil, donde un individuo en estado alterado perturbaba el orden público. La persona finalmente desistió de su actitud y fue recogida por un familiar, al no encontrarse en condiciones para conducir.
Asimismo, a las 15:30 horas, se entregó oficialmente un decreto de precinto en un inmueble de la calle Eras, debido al riesgo de desprendimiento de una pared. Se notificó personalmente al presidente de la comunidad y a los vecinos afectados sobre la imposibilidad de usar ciertas estancias por motivos de seguridad estructural.
Un día intenso para las fuerzas de seguridad locales, que debieron actuar en múltiples frentes para garantizar el bienestar y la seguridad de la ciudadanía benaventana.
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