Sucesos

Tres años y tres meses de prisión por vender droga en Fermoselle y otras zonas de Arribes del Duero

No cumplirá condena si interna en un centro de desintoxicación

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Tres años y tres meses de prisión para el acusado J.S.B. por un delito contra la salud pública. El procesado ha sido acusado por abastecer de cocaína a varias localidades de Las Arribes del Duero (Pereña de la Ribera, Aldedávila de la Ribera, Trabanca y Fermoselle) 

En un principio el fiscal solicitaba una condena superior, pero las partes llegaron a un acuerdo, por lo que no cumplirá el periodo en prisión si se interna en un centro de desintoxicación y no delinque en cuatro años. Del mismo modo deberá abonar una multa de 3.000 euros, que conllevará un mes más de prisión si no la paga.

Así mismo el ministerio público ha tenido en cuenta que el procesado era consumidor habitual de cocaína y que ejercía esa venta para sufragar dicha adicción.

Antecedentes

Los hechos se remontan a 2015, cuando la Guardia Civil comienza la investigación de la ‘operación WIND’, tras tener el conocimiento de a la alta incidencia del volumen de consumo y venta de droga en la zona de Las Arribes.

Fruto de la investigación, se pudo descubrir que todo se gestionaba desde una vivienda de Villarino de los Aires. Allí el autor llevaba a cabo la venta de dosis de cocaína a localidades cercanas de la provincia (Pereña de la Ribera, Aldedávila de la Ribera y Trabanca), así como de la provincia de Zamora (Fermoselle).

El procesado fue detenido en noviembre de 2015 en Trabanca. Después de realizar una transacción de droga. Una hija suya menor de edad también participaba en el trapicheo.

Al día siguiente, en el registro de su vivienda se intervinieron 66 dosis de cocaína preparadas para la venta, útiles para el corte de la droga, dos terminales móviles y un turismo.

Comentarios
Anónimo Hace 4 años (20/06/2019 18:28)
conductas, no cinductas, perdón. <br/>10
Anónimo Hace 4 años (20/06/2019 18:25)
La pena impuesta es un auténtico cachondeo. Que se vayan a tomar por donde todos sabemos los políticos, los fiscales y los jueces, que no están haciendo bien su trabajo, para erradicar las cinductas, como la del elemento éste que traficaba también en mi pueblo. Es una vergüenza total y absoluta, que más pronto que tarde, traerá consecuencias más graves entre toda la población española. Que sigan así, que lo único que conseguirán entre todos los aludidos anteriormente, es que nos parezcamos a "Venezuela". <br/>65
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