“Las molestias por el ruido no es ni mucho menos lo más grave”, comentaba la presidenta de la asociación de vecinos del casco antiguo, Carmen Núñez, que tomaba la palabra en la rueda de prensa organizada por Ciudadanos Zamora respecto a la polémica del botellón en Jueves Santo en el parque de San Martín.
“Cristales rotos, cerraduras reventadas, jóvenes defecando en el portal…”, lamentaba Núñez, que igualmente decía que “la bebida es lo de menos”, haciendo referencia “a cosas más graves” como “venta de droga y menores borrachas entrando en coches con varios chicos”.
“La situación es gravísima”, reconocía la presidenta de la asociación de vecinos, que también hacía referencia a la masificación en la zona de San Martín “que en un momento determinado puede obstaculizar el paso de una ambulancia que tenga que acudir al casco antiguo a cubrir una urgencia”.
Por eso, Núñez insistía en pedir al equipo de gobierno “que ponga remedio”, y concretamente insistía en Antidio Fagúndez, concejal de Seguridad Ciudadana: “Si es cuestión de votos, que lo soluciones y los tiene seguro”, ironizaba.
Por su parte, un vecino, Antonio González, denunciaba que “hay menores bebiendo, personas vendiendo drogas e incluso situaciones de acoso sexual”, a la vez que añadía: “también se ve como hombres adultos llegan a última hora para intentar abusar de chicas jóvenes bebidas”. Igualmente, lamentaba que esa noche sea “el único día que se le hace caso al casco antiguo” y finalizaba pidiendo mayor implicación del equipo de gobierno para revitalizar esa zona de la ciudad “a la que no se le hace ni puto caso”.
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