Llegaba una parte dura del calendario en la que el Zamora iba a jugar ante tres equipos importantes y los resultados y la imagen han terminado por desmoralizar todavía más a una afición que lleva tres semanas sin cantar un gol de su equipo. Un punto de nueve posibles dejan a los rojiblancos en tierra de nadie y a los aficionados planteándose si es el peor Zamora de la historia en Tercera División.
Este domingo, todavía ochocientos fieles confiaban en que la situación podía revertirse y acudieron al Ruta de la Plata con la ilusión de ver reaccionar al equipo. Pero lo que se encontraron volvió a ser un mal partido, un mal resultado y una imagen que abochornó a muchos de los espectadores. Tanto que la mayoría estaba marchándose cuando el árbitro pitó el final.
Gran parte de los jugadores y el cuerpo técnico se quedó en el campo para recibir el dictamen del respetable. Algún silbido pero sobre todo decepción por saber que el equipo estará por segundo año consecutivo lejos de jugar fase de ascenso, y por tanto de pelear por dar el salto a la Segunda División B.
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