El Ruta de la Plata vivió este domingo, por enésima jornada consecutiva, su peor entrada de la temporada. Después de los poco más de cuatrocientos espectadores que acudieron el pasado domingo al municipal zamorano, esta vez no se alcanzó la cifra de cuatrocientos. Sesenta aficionados en preferencia, ciento cincuenta en fondo norte y otros tantos en preferencia hacían que la asistencia se quedase en poco menos de cuatrocientos hinchas.
Al menos, los seguidores que acudieron tuvieron una tarde apacible en lo meteorológico y también entretenida en lo deportivo. Sin nada en juego, el Zamora tuvo rachas de buen juego, también hubo goles, emoción con el 2-1 de la Cebrereña y fortuna en forma de sorteos al descanso de un jamón, una paletilla, entradas de cine, entradas para el España – Argentina, y camisetas de ambas selecciones.
Esta vez no hicieron falta las mantas, pero sí las viandas pese a lo temprano del choque. Y es que fueron muchos los aficionados que llevaron el café con dulces típicos semanasanteros como las aceitadas para compartir al descanso. Y es que Zamora se mete de lleno en la Semana Santa, que será la continuación de la penitencia para un club rojiblanco al que se le harán muy largos los dos meses que restan de competición.
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