Murci para salvar al Zamora. La diana del delantero rojiblanco, en modo caníbal, sirvió para que los rojiblancos se llevasen un duelo en el minuto 89 por un 1-0 en el que no merecieron, ni de lejos, tanto botín. Pero esto es el fútbol. Gana el que anota y no siempre es el que merece.
Este año el equipo de Tornadijo tiene recursos individuales y uno de ellos es Murci. El ariete lleva cuatro dianas en cuatro encuentros y la de este domingo sirve para sumar tres puntos que ayudan al Zamora a escalar posiciones en la tabla y sobre todo para intentar rebajar una tensión desmesurada en el Ruta de la Plata. Eso sí, el gol de Murci no debe esconder ni maquillar un mal partido del Zamora.
Un Zamora que durante la primera parte estuvo a merced del Astorga. Salvo los primeros diez minutos de tanteo, los de Tornadijo fueron netamente inferiores a los maragatos en todo. El Astorga se mostró como un equipo imperial en defensa, gobernando el centro del campo y con mucho talento arriba. Eso se tradujo en tres ocasiones claras de gol para los visitantes en la primera parte, una de ellas besó el larguero en una vaselina de Roberto Puente.
En el Zamora no funcionaba nada. El equipo seguía sufriendo en defensa, mostrando nervios impropios de jugadores llamados a pelear por cotas muy altas. El trivote del centro del campo naufragaba en cada transición y arriba los tres hombres ofensivos estaban desesperados, con escasos balones que llevarse a las botas. Lo mejor del primer acto fue llegar al descanso con empate a cero.
El paso por vestuarios sentó bien al Zamora, que visto que no tenía un día inspirado en la triangulación ante un Astorga muy superior, decidió hacer un juego más directo. Diagonales a las bandas y Murci como hombre guía arriba. El equipo de Tornadijo fue creciendo poco a poco y en la segunda parte ganó enteros. El Astorga perdió el control del partido pero seguía firme en defensa y amenazante arriba.
El carrusel de cambios benefició al Zamora. Mientras el Astorga iba perdiendo contacto con el balón, los rojiblancos lo ganaban. Javi Bueno ofreció algo más de valentía a la medular, Fer fue el de las grandes tardes, poniendo una intensidad desorbitada que levantó al público de los asientos, y Garban ofreció la frescura que le faltaba al equipo en el tramo final. El Zamora mejoró ostensiblemente pero seguía faltando último pase.
Los minutos pasaban y cuando parecía que el duelo acabaría con un reparto de puntos apareció Murci para empujar un pase de Garban y llevar a la grada al éxtasis para celebrar el primer triunfo del curso. Triunfo agónico, necesario, muy celebrado pero que no debe esconder que a este Zamora le queda un largo camino de mejoría por delante.
Murci rescata al Zamora en el último suspiro
El delantero rojiblanco anotaba la diana de la victoria en el último minuto del tiempo reglamentario a pase de Garbán. Los zamoranos cuajaron una primera parte de muy poco nivel ante un Astorga que mereció marcharse al descanso con algún tanto de renta. Pero la escuadra de Tornadijo mudó su piel en la segunda mitad y ofreció una mejor cara para empujar y conseguir el premio tras cuarenta y cinco minutos finales algo más meritorios.
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