Como cada año, al término de la procesión de la Resurrección, el Ayuntamiento de Zamora hacía un balance de diez días de enorme trasiego en la capital zamorana con la celebración de la Semana Santa. El encargado de realizar este balance fue el concejal de Seguridad Ciudadana, Antidio Fagúndez, que valoraba como “positivo” el balance de la Semana Santa “que finalmente no fue tan mala como se pensaba en un principio” en términos de previsiones meteorológicas.
“Excepto la noche del miércoles, todos los zamoranos y visitantes han podido disfrutar de la Semana Santa que sigue siendo el principal motor económico, turístico, cultural y religioso de Zamora”, comentaban desde el Consistorio, a la vez que confirmaban que ha vuelto a ser “un impulso para la economía local, como se ha demostrado al ver los bares, terrazas, restaurantes y tiendas llenos durante estos días”.
Durante estos días, los servicios contratados han tapado y destapado alrededor de 4.500 señales de la ciudad para que los desfiles lucieran bien, han realizado casi 5.000 movimientos de vallas, se han colocado 5.200 bolardos para los cortes de calle, los servicios de limpieza recogieron 620.000 kilos de basura y los baños portátiles han sido usados por 55.000 personas.
A la hora de la seguridad, desde el Ayuntamiento agregaban que se atendieron 583 llamadas, 187 de ellas desde el 1-1-2. Además de las llamadas atendidas, 53 fueron incidentes sanitarios, 27 accidentes de tráfico, y de las pruebas de alcoholemia realizadas, un 12 por ciento arrojaron positivos. Por todo ello, desde el Consistorio agradecieron el trabajo de todos los cuerpos implicados: Policía Local, Protección Civil y Cruz Roja, que atendió los principales incidentes.
Todo dentro de una Semana Santa de “normalidad” que volvió a dejar en Zamora la presencia de “más de 150.000 personas” a la espera de los datos concretos que se irán conociendo en los próximos días.
El Ayuntamiento hace un balance “positivo” de la Semana Santa que reunió en Zamora “a unas 150.000 personas”
Desde el Consistorio se estima que otro año más la población de la capital volvió a duplicarse con creces hasta superar las 150.000 personas durante los días centrales de la Semana Santa. No se produjeron incidentes destacados y como curiosidad apuntar que los servicios de limpieza recogieron 620.000 kilos de basura durante esta semana.
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