España superó el pasado agosto las trescientas víctimas mortales por ahogamiento no intencionales en espacios acuáticos, al perder la vida 74 personas este mes, lo que eleva a 307 los fallecimientos por esta causa en lo que va de año.
Este dato iguala la cifra que el Informe Nacional de Ahogamientos (INA), que elabora la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo, registró el pasado año el 6 de octubre y supone un 22,31 por ciento más que los 251 óbitos ocurridos hasta el 31 de agosto de 2018, es decir, que este año se llevan registrado 56 muertes más hasta esta fecha desde el 1 de enero.
Asimismo, el de 2019 quedará, hasta el momento, como el peor agosto desde que existe serie histórica, cuando en 2015 la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo comienza a realizar esta estadística ante la ausencia de datos diarios.
Ha superado los 71 fallecidos que se dieron en 2017, hasta ahora el peor registro en que ha sido, en el cuatrienio 2015-2018, el año con más muertes por ahogamientos no intencionales en los espacios acuáticos españoles, con 481, y los 70 de 2015, los 65 del año pasado y los 60 de 2016, la anualidad que menos muertes se dieron en agosto.
Este crecimiento se ha producido en la segunda quincena del mes, ya que en los primeros quince días se había contabilizado una muerte menos que en 2018, el segundo mejor dato del quinquenio en conjunto, aunque ya a mitad de mes era el tercero peor de la serie.
En agosto, más de seis de cada diez ahogamientos mortales, 49 de los 74, se han producidos en cuatro territorios: 17 en Comunidad Valenciana, 13 en Cataluña, 10 en Galicia y 9 en Andalucía. Otros siete se han registrado en Cantabria, seis en Canarias, cinco en Islas Baleares, dos en Comunidad de Madrid y Región de Murcia y uno en Asturias, Castilla-La Mancha y Castilla y León.
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