Así lo ha explicado este jueves el jefe de gabinete del JEMAD, el general Carlos Pérez, que ha recordado que Defensa tomó la decisión en marzo de activar tanto a los reservistas de la sanidad militar como a los alumnos del Cuerpo de Sanidad Militar.
Las Fuerzas Armadas cuentan con dos tipos de reservistas: aquellos ciudadanos que voluntariamente se inscriben como tales mientras siguen desarrollando su trabajo ordinario; y los denominados Reservistas de Especial Disponibilidad (RED), que son militares que han abandonado la milicia debido a la edad.
El general Pérez ha explicado que en un primer momento se valoró la movilización de todos los reservistas de sanidad pero, dado que los voluntarios están trabajando a su vez en el sistema general de sanidad, finalmente se decidió no retirarles de su puesto de trabajo y activar solamente a los RED.
El general Pérez ha reconocido que el número de este personal no es muy elevado, pero en cualquier caso aportan una actividad "muy valiosa" para las Fuerzas Armadas en la lucha contra el coronavirus. "El personal de reservistas es un potencial muy valioso que tenemos en las Fuerzas Armadas", ha reconocido.
En total, son unos 3.000 efectivos de la sanidad militar los que están implicados en la Operación Balmis y desarrollan su trabajo en el Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla en Madrid y el Hospital Militar de Zaragoza.
Defensa no prevé activar a reservistas para luchar contra el Covid-19, solo a los sanitarios militares
El Ministerio de Defensa no prevé activar a los reservistas de las Fuerzas Armadas para participar en la misión de lucha contra el coronavirus y limita esta acción a los sanitarios militares que ya fueron llamados a incorporarse al inicio de la crisis del Covid-19.
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