El subdelegado del Gobierno de España en Zamora, Ángel Blanco, hizo una valoración este lunes de las denuncias interpuestas este primer fin de semana de desescalada en la provincia zamorana. Blanco ha querido recordar que "no podemos olvidar que estamos en un estado de alarma, en confinamiento y que existen restricciones", así como que lo conseguido hasta la fecha "ha sido por el esfuerzo colectivo, la generosidad y sacrificio de todos los zamoranos". Por ello, el subdelegado hace hincapié en que hay que "cumplir y acatar las órdenes" para no "dilapidar" lo logrado.
Respecto a la capital, Blanco ha explicado que se han dado casos de pequeñas aglomeraciones en las que no se cumplía la distancia social, pero que la Policía Nacional y la Policía Local ha tenido un "comportamiento pedagógico" para "explicar la regulación e informar a la población".
Por su parte, respecto al resto de la provincia, Ángel Blanco ha señalado que "salvo raras excepciones" ha reinado "la normalidad". En Toro los dirigentes se han declaro "muy satisfechos" por el comportamiento, mientras que en Benavente se han dado casos de sanciones "pero no quedaba más remedio", según Blanco.
Así, Ángel Blanco ha dejado claro que a lo largo del fin de semana se han interpuesto un total de 133 denuncias, mejores cifras que las del fin de semana anterior, que se cerró con 150. Por todo ello, el subdelegado ha querido reiterar que "debemos tener en cuenta las medidas sanitarias de distanciamiento", y que se debe hacer un "uso racional" de las medidas de alivio.
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