Instituciones, sindicatos y afectados ponen las bases “para empezar a reconstruir lo que arrasó el fuego de Lober”

El objetivo principal es que los afectados recuperen cuanto antes la normalidad. La petición principal pasa por agilizar lo máximo posible el levantamiento de las restricciones que se derivan de la ley de montes tras un incendio, que suelen extenderse durante cinco años.

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El presidente en funciones de la Diputación de Zamora Jesús María Prada Saavedra, El vicepresidente tercero, diputado de Obras Municipales y Medio Ambiente y diputado provincial por Aliste, Tábara y Alba, Javier Faúndez Domínguez, el diputado de Agricultura y Ganadería, Ángel Sánchez Hidalgo, y la delegada territorial de la Junta de Castilla y León, Clara San Damián Hernández, y el subdelegado accidental del Gobierno, Dionisio Ferrero García, mantuvieron este miércoles una reunión con los ganaderos Ismael Rey Rodríguez y Juan Antonio Vega Gago, en representación de los damnificados por el incendio que los pasados 15 y 16 de agosto, que afectó principalmente a las localidades de Gallegos del Río, Vegalatrave de Alba, Lober de Aliste y Domez de Alba.

También estuvieron presentes en la reunión, los jefes de los servicios territoriales de Medio Ambiente y de Agricultura, Manuel Moreno López y Rosa Alonso Fernández, respectivamente, los alcaldes de Gallegos del Río, Pascual Blanco Martín, y Vegalatrave, Mª Isabel Alonso Genicio, y representantes de las organizaciones profesionales agrarias ASAJA, Antonio Medina Roldán, UPA, Aurelio González del Río, y COAG, Lorenzo Rivera Prieto.

El objetivo, según explicaba Jesús María Prada, es “empezar a reconstruir lo que el fuego ha arrasado y de esta forma ayudar a quienes quieren vivir en los pueblos”, comentaba, a la vez que agradecía el trabajo desarrollado por los servicios de extinción y por los propios vecinos.

En cuanto a las medidas concretas, la delegada de la Junta en Zamora, Clara San Damián, explicó que a día de hoy la ley de montes obliga a someter el terreno calcinado a una serie de restricciones, de forma que los terrenos quemados deben estar cinco años sin que se puede trabajar en ellos. Precisamente la principal demanda de los afectados es que ese intervalo de tiempo sea inferior, para poder usar los pastos antes y también no perder las ayudas PAC.

“Vamos a llevar a cabo todo lo necesario para limitar el plazo de esos cinco años. Estudiaremos caso por caso para levantar la restricción lo antes posible. Hay veinte agricultores y ganaderos afectados e iremos caso por caso para levantar lo antes posible esas limitaciones”, reconocía Clara San Damián, que añadía otras medidas de ayuda que aportará la Junta de Castilla y León. 

“Tramitaremos de manera urgente el levantamiento de los necesarios corredores para que los ganaderos puedan dar de comer a los animales. Además también ayudaremos a los seis cotos de caza que se vieron afectados en el incendio. Por otro lado, desde la Junta nos comprometemos a arreglar todos los daños que nuestra maquinaria haya causado en las labores de extinción en las propiedades de los vecinos”, comentaba San Damián, que insistía en que la superficie arable que se ha quemado (casi la mitad) no se verá afectada de ninguna manera para poder recibir sin problema las ayudas PAC, pero que el problema estará en los terrenos pastables, que es a los que habrá que intentar levantar “cuanto antes” sus restricciones.

Desde el Gobierno de España se explicó a los agricultores y ganaderos las tres líneas de acción en las que puede trabajar esta institución: colaborar para que la tramitación del cobro de los seguros sea más ágil y fácil, aplicar el decreto de emergencias de Interior para aquellas atenciones inmediatas que sin ser mucha cantidad sí que se cobran de forma rápida, y pedir a los ayuntamientos que soliciten la declaración de zona catastrófica con el apoyo de la Subdelegación.

Por último, tomaba la palabra Javier Faúndez para anunciar las ayudas de la Diputación. En este aspecto, la Institución Provincial ya ha destinado dos partidas de 5.000 euros cada una para cubrir los portes de las donaciones que han realizado los agricultores de otros puntos de la provincia. “Comparemos forraje porque es de lo que menos hay y no se cubren todas las necesidades”, reconocía Faúndez, que agradecía la rápida respuesta de todos los sectores “que ha tenido repercusión nacional”. Además, cerraba asegurando que los afectados tendrán el parque de maquinaria de la Diputación para reparación de caminos y cosas similares relacionadas con los daños causados por el incendio.

Para finalizar, los representantes de los afectados y los sindicatos se mostraron satisfechos con lo tratado en una reunión que definieron como “productiva”, pero pidieron que “las palabras se conviertan en hechos” y que se facilite lo máximo posible toda la burocracia. Igualmente, solicitaron que cuanto antes se pudiera levantar alguna restricción para que el ganador pudiera salir de los recintos en los que se encuentran. “Un ganado acostumbrado a salir todos los días si está encerrado se estresa y necesitamos sacarlo. Eso es urgente”, clamaban.

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