El fin de semana dejó en Zamora 149 casos y seis fallecidos. Unos datos que situaron a la provincia en el punto de mira de las medidas restrictivas tras el aviso de la Junta el pasado jueves. Pese a que el lunes la incidencia siguió al alza con 61 datos, el pasado martes la buena noticia llegaba de solo once positivos detectados.
Una tendencia al alza que encendió las luces de la esperanza en la provincia sobre la que volaba la amenaza de medidas restrictivas ante el avance del virus. La consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado, señaló que la tendencia "por fin se encontraba en descenso”.
Una tendencia que se sustrae tras registrar 296 casos en la última semana, disminuyendo considerablemente desde la última vez que ofreció los datos semanales el pasado jueves, con un total de 430.
Estos datos están muy lejos de los registrados hace un mes, cuando en una semana se registraron 106 casos, pero muestran como se está empezando a frenar el avance del coronavirus, al menos de momento. Por su parte, Casado tampoco mostró especial de la Junta en ninguna zona básica de salud zamorana.
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