Pues así es, el 95% de los cánceres de tiroides se superan en la provincia. Así lo apostilló José Luis Pardal, otorrinolaringólogo del Complejo Asistencial de Zamora durante la presentación de una nueva edición de los Cuadernos de Salud de la Fundación Caja Rural sobre la patología tiroidea, de la que ha sido partícipe junto a M. Ángeles Martín Almendra, también especialista en el campo.
Aunque Zamora ya no es un lugar de bocio endémico, como venía siendo así desde hace unos años, sigue registrando una alta incidencia de este tipo de patología. Ocurre algo similar al caso del noroeste peninsular, explicó Pardal, donde la ingesta de yodo, ligada a los hábitos de vida, podría perjudicar a la recuperación de este tipo de enfermedad. Por lo tanto, la cantidad adecuada de yodo, en la sal por ejemplo, "es clave" para mejorar el diagnóstico, reiteró por su parte el doctor Diego.
En Zamora, donde hay un grupo de investigación sobre la patología de las glándulas tiroides y paratiroides, así como una colaboración entre otorrinos, endocrinos y laboratorios de bioquímica, radiodiagnóstico y anatomía patológica, se han mejorado los métodos quirúrgicos a la hora de detectar, pronosticar y tratar este tipo de enfermedades que afectan a la glándula de tiroides, situada en el cuello y cuya función es vital para el organismo.
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