La inflación española subió durante 2016 un 1,6% y ha comenzado el año con esa tendencia alcista, registrando hasta la fecha un incremento en torno al 3%. Consciente del efecto que tiene esto en el bolsillo de los hogares, www.rastreator.com ha realizado un análisis sobre cuáles son los tres gastos que más preocupan a los españoles y las medidas de ahorro toman para afrontarlos.
Según el tercer Estudio de Comparación Online hacia el Ahorro Inteligente, realizado por la compañía, al 91% de los españoles le preocupa algún tipo de gasto al que tiene que hacer frente a lo largo del año. En este sentido, el gasto que más inquietud suscita entre los consumidores es la energía. A un 58,8% le preocupa su factura energética, esto es 10 puntos por encima del siguiente gasto, la vivienda, que a pesar de que adquirirla o alquilarla requiere un gran desembolso, solo le genera inquietud a un 49%. A continuación, cerrando el top 3 de preocupaciones en cuanto a gastos, se encuentra la alimentación y bebidas, citadas por un 48% de los encuestados.
Estas tres partidas son las que más preocupan y las que mayor gasto suponen para los hogares. De los 27.420 euros que gastan las familias anualmente, el 47% se va a hacer frente a la factura energética, la vivienda y la alimentación y bebidas. No es de extrañar, por tanto, que sus fluctuaciones de precio afecten tanto al bolsillo de los españoles, ya que cubren necesidades básicas.
Por ejemplo, el precio de la vivienda subió un 4,5% el año pasado, ostentando el mayor repunte desde el pinchazo de la burbuja inmobiliaria y sumando así tres años al alza. Además, el precio del alquiler sigue subiendo, pero sí hay buenas noticias para los hipotecados: el Euríbor cerró 2016 en negativo (en mínimo histórico) y se espera que continúe esta tendencia. Por su parte, el precio de la electricidad se ha encarecido un 19% respecto al ejercicio anterior, a pesar de que los primeros meses del año ha estado experimentando un ligero descenso3.
¿Cómo ahorran los españoles en sus gastos cotidianos?
Debido a la preocupación mostrada por estos gastos, los españoles tienden a tomar medidas de ahorro para reducirlos, aunque el modo de hacerlo puede variar en función de la naturaleza del gasto.
La partida de alimentación y bebidas es una donde los consumidores más consiguen ahorrar y hasta un 75,5% de los encuestados han recortado su gasto de ahí. El 58% de ellos han apostado por comparar precios para quedarse con el más adecuado, el 29% por consumir menos y el 13% por cambiar de proveedor o supermercado.
En el caso de la energía, el 70% ha tomado medidas para reducir su factura. Entre estos los ahorradores, el 64% ha optado por reducir directamente su consumo, el 22% ha cambiado de compañía y el 15% suele comparar precios.
Por último, en cuanto a la vivienda, apenas un 23% de los españoles han podido aplicar alguna medida de ahorro. El modo más popular de ahorrar en este ámbito es comparando precios, como ha hecho el 42% de ellos.
En palabras de Fernando Summers, CEO de Rastreator.com, “hay gastos muy importantes del día a día que cubren necesidades básicas y cuyo ahorro depende en gran medida del uso que hagamos de ellos. Por eso, una de las medidas más importantes y factibles de ahorro es comparar las diferentes opciones disponibles en el mercado para asegurarnos de que el proveedor contratado es el indicado y que nuestro gasto se adapta a nuestro consumo”.
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