La Junta de Castilla y León continúa trabajando en la defensa y promoción de los Derechos Humanos en países empobrecidos a través de diferentes programas e instrumentos que canalizan los esfuerzos en la lucha contra la pobreza y las desigualdades en todas sus dimensiones.
Uno de los mecanismos de la política de cooperación para el desarrollo es la publicación de subvenciones para proyectos de desarrollo y microacciones en el exterior. Esta convocatoria, de concurrencia competitiva, está dirigida a las ONG con sede e inscritas como agentes de cooperación para el desarrollo, para la ejecución de intervenciones de desarrollo cuyo objetivo sea mejorar las condiciones de vida y el progreso de las personas y poblaciones más vulnerables en países empobrecidos.
Las subvenciones contarán con un presupuesto total de 3.595.000 euros y se destinarán a las acciones y estrategias marcadas por el recientemente aprobado tercer Plan Director de Cooperación al Desarrollo y por la Agenda de Desarrollo Mundial 2030 y sus 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible. La aplicación del enfoque de género, la transversalización del enfoque de sostenibilidad medioambiental y la apropiación del Enfoque Basado en Derechos Humanos (EBDH) son las tres prioridades trasversales que orientan los criterios de valoración, entre otros parámetros.
Países, intervenciones y colectivos prioritarios
Siguiendo las directrices internacionales se ha realizado un esfuerzo de concentración sectorial y geográfica para incrementar el impacto de las intervenciones en términos de desarrollo sostenible. Así, se consideran prioritarios los siguientes países: Senegal, Burkina Faso, Tanzania, Mozambique, Guatemala, Nicaragua, Bolivia, Perú e India.
Por otro lado, el apoyo a proyectos de desarrollo en países empobrecidos se concentra en seis prioridades sectoriales de intervención vinculadas a seis derechos humanos dirigidos a garantizar unas condiciones de vida dignas a las personas. Esos seis derechos son el derecho a la alimentación, al agua y al saneamiento, a la educación, a la salud, a la vivienda y a una vida adecuada y medios de subsistencia.
Todas las acciones deben dirigirse a los colectivos vulnerables de estos territorios, con una atención especial a las mujeres, niños y jóvenes en situación de exclusión, pueblos indígenas, poblaciones campesinas, población asentada en cinturones de pobreza urbana y personas mayores, dependientes, con discapacidad y enfermas sin recursos.
La cuantía de las subvenciones otorgadas a cada proyecto no podrá exceder de 200.000 euros ni el 80% del presupuesto total del proyecto. En el caso de las microacciones en el exterior, las subvenciones otorgadas no podrán superar el 90% del presupuesto total del proyecto, ni exceder de la cuantía de 45.000 euros.
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