El Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas había presentado a los organismos pertinentes (Dirección General de Empleo, Dirección General de Aviación Civil y la propia Air Europa Líneas Aéreas S.A.U.) la desconvocatoria oficial de huelga, que iba a afectar a los vuelos de Air Europa los próximos días 30 y 31 de julio y 1 y 2 de agosto, siempre según los servicios mínimos fijados por las partes o, en su defecto, por el Ministerio de Fomento.
La huelga se convocó tras la reunión de mediación previa ante el SIMA, el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje, que es el organismo oficial encargado de intentar lograr un acuerdo entre las partes que evite el conflicto. A pesar del fracaso de la reunión que se mantuvo en la sede del SIMA, los delegados sindicales de Sepla confiaban en apurar un acuerdo de última hora. “Agotaremos todos los canales de diálogo hasta el último minuto, porque entendemos que nuestra huelga perjudica principalmente a nuestros pasajeros”. Este miércoles, la huelga se ha desconvocado.
Air Europa no ha mostrado intención alguna de corregir las políticas que han llevado al colectivo al extremo, primero de solicitar y más tarde de apoyar por abrumadora mayoría, la iniciativa de huelga. Destacan, en primer lugar, el desvío de producción a la compañía Aeronova, que está causando un grave perjuicio tanto profesional como económico a los pilotos de Air Europa.
También denuncian “la reiterada persecución que la compañía hace a aquellos pilotos que no considera de su órbita o que exigen, velada o explícitamente, que se cumplan sus derechos”. Las sanciones y castigos van desde quitarles funciones dentro de sus competencias profesionales o impedirles su legítimo ascenso y promoción.
Por otro lado, está la “constante y arbitraria modificación de las programaciones que la compañía hace sin la antelación suficiente como para que los pilotos puedan planificar su vida personal y familiar”. Y la negativa constante a aportar información básica a la Sección Sindical para el mínimo ejercicio de sus funciones como representantes de sus compañeros pilotos. “Esta actitud forma parte de una arraigada política empresarial que consiste en ningunear y entorpecer la labor de representación sindical de los delegados de Sepla”, añade el sindicato.
“Tendemos la mano a la compañía para que rectifique una conducta que sólo ha conseguido provocar un profundo malestar en el colectivo. Nosotros nos hemos mostrado flexibles, y esperamos que la empresa esté a la altura y dé por fin muestra de generosidad hacia sus pasajeros, que no tienen por qué pagar el desprecio que el señor Hidalgo muestra públicamente hacia este colectivo”, reitera un miembro de la Sección Sindical de Sepla en Air Europa.
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