Mientras prosigue el debate de si Zamora debe tener un nuevo Museo de Semana Santa o ampliar el ya existente, el local que alberga un enorme puñado de obras escultóricas de la Semana Santa sigue recibiendo día tras días las visitas de turistas que quieren conocer de primera mano alguno de los pasos más representativos de la semana de pasión zamorana.
Por eso, y mientras se soluciona el dilema, los responsables del museo han decidido hacerle un lavado de cara para que la impresión de los visitantes sea la más positiva posible. Para ello, durante las próximas semanas el museo permanecerá cerrado para poder llevar a cabo diferentes acciones que redunden en mejorar la estética de este pequeño espacio.
Unas acciones que en su mayor parte tendrán que ver con el arreglo de desconchones y el dar una nueva mano de pintura a todas las paredes. De momento se desconoce el tiempo de duración de los trabajos, pero la estimación inicial es que el museo permanezca cerrado durante el próximo mes.
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