Una vez más, una escapada fue la protagonista de la etapa, con el doble campeón de Europa, el suizo Stefan Küng, y el polaco Piotr Brozyna, que se marchaban poco después del kilómetro diez, llegando a tener 2-45, y siendo atrapados a una decena de kilómetros de la llegada, cuando Australia, buscando la etapa, y Dinamarca, mantener el liderato, comenzaron a tirar.
Asborjn Kragh Andersen mantiene el amarillo, aunque es presumible que por último día, ya que este miércoles llegan los Alpes, con el primero de los cuatro finales en alto, en Plateau de Solaison, tras 165,3 kilómetros desde Saint Vulbas, y con un perfil no demasiado marcado antes de la ascensión final: Côte de Premeyzel (cuarta, km. 35) y Côte de Cruseilles (cuarta, km. 111).
“Aunque es una etapa menos complicada que las siguientes, la ascensión final es bastante complicada. Son cuarenta minutos de subida, tiene rampas de 12 y 15%, y hará mucho daño. Hasta el momento la carrera está yendo muy tranquila y eso es una ventaja para los colombianos. Pero la gente con miedo, con nervios. Veremos este miércoles cómo vamos”, terminaba el responsable del equipo español.
Jaime Rosón afronta esta primera etapa de montaña en el puesto 38 de la clasificación general a 2 minutos y 38 segundos del líder. El zamorano aseguraba horas antes del inicio de las etapas de montaña: “Esperemos que las fuerzas acompañen y podamos hacer cosas bonitas”.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios