El gol le sigue siendo esquivo al Zamora Club de Fútbol. El conjunto rojiblanco acumula una jornada más sin lograr perforar la portería rival y las alarmas, aunque públicamente no se exprese, se encienden de forma importante en el seno del club zamorano por el pírrico gol anotado en cinco encuentros. Este domingo, ante el Racing de Ferrol, el Zamora fue muy superior al equipo gallego en ocasiones, pero al final, y tras perdonar lo imperdonable, estuvo a punto de repetirse la historia de los últimos duelos. Y es que Joselu y Aspas rondaron el gol en los últimos minutos con un mano a mano que salvó Miguel y con un balón a la cruceta.
Antes de esas ocasiones, que vinieron envueltas en los mejores minutos del Racing de Ferrol coincidentes con la salida al campo de Dalmau y Marcos Álvarez, el Zamora fue muy superior a su rival. Los rojiblancos dejaron prácticamente inédito a un equipo gallego que no era capaz de encontrar portería y que sufría para taponar el juego local. Los zamoranos demostraron arrojo, valentía y apenas se notó la opresión que siempre generan las derrotas. Los zamoranos mostraron amplitud de recursos con juego por bandas, balón interior, disparos exteriores y acciones de estrategia a balón parado. Pero todas las acciones terminaban en los guantes de Mackay o directamente fuera.
En la primera mitad, la superioridad del Zamora en ocasiones fue abrumadora. No tanto en el juego, donde ambos equipos se alternaron posesiones, pero si en cuanto a llegadas a puerta. Los dos lanzamientos de falta del Racing de Ferrol durante los cuarenta y cinco minutos fueron contestados por más de media docena de ocasiones del Zamora. Un balón al palo de Coque, dos lanzamientos de Carlos de la Nava que tapó el portero, un disparo de Rodri que también repelió el meta gallego a la cepa del poste, un centro envenenado de Mateos que se colaba por la escuadra y un remate de Salva Rivas casi sobre la misma línea que llevó una dirección incorrecta, fueron acciones en las que se cantó gol en la grada, pero que por un motivo u otro no tuvieron el final esperado.
Tras el paso por los vestuarios, el duelo se equilibró. El Zamora fue de más a menos en este segundo acto y el Racing de Ferrol justo al contrario. Las salidas de Dalmau y Álvarez le dieron más chispa arriba al equipo gallego. Un mano a mano de Joselu que desbarató Miguel y un balón a la cruceta de Aspas desde veinticinco metros, fueron las dos ocasiones más claras, al margen de disparos desviados de Pablo Rey y una buena cabalgada de Dalmau en los últimos segundos. Mientras, el Zamora, fue perdiendo fuelle y las ocasiones empezaron a escasear. Aun así, un remate de Salva Rivas y otro de Mut, ambos a centros de Prada, y un disparo desde la frontal del área de Carlos de la Nava, fueron acciones que generaron incertidumbre a la portería de Mackay.
Al final, los dos conjuntos no tuvieron más remedio que firmar las tablas. Un empate que no sirve ni a uno y ni a otro para acercarse a sus respectivos objetivos.
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