Después de muchas semanas preparando el proyecto tenía muchas ganas de empezar a trabajar con los jugadores. Las ganas son tremendas de hacerlo bien, de trabajar duro y de intentar llegar a lo máximo.
¿Has podido confeccionar con libertad la plantilla?
Sí, he tenido libertad total a la hora de la confección de la plantilla y de la configuración de la pretemporada. En el aspecto deportivo he tenido libertad absoluta dentro de unos límites de presupuesto.
¿Y cómo valoras la plantilla que se ha podido conformar?
Dentro de nuestras posibilidades, la plantilla está muy compensada. Creo que hemos logrado unir juventud y veteranía. Es una plantilla que tiene defensa, ataque, gente de calidad y gente luchadora. Estoy contento con el equipo que hemos logrado configurar.
¿Qué se le vende a un jugador para que venga a Zamora?
Hemos ido a casos muy puntuales. Hemos tenido muchos ofrecimientos desde que se confirmó que salíamos en Segunda. Pero hemos ido a gente que ya conocíamos, que han demostrado su valía para estar aquí y que ahora apostamos por ellos aquí. Les hemos hecho ver a todos que son personas importantes para nuestro proyecto y que puede ser una oportunidad tanto para ellos como para nosotros.
¿Con qué objetivo parte el equipo?
El objetivo es la permanencia. Sobre el papel hay muchos transatlánticos como Melilla, Elche, los filiales o Gáldar que se mueven a una distancia casi abismal de nosotros en cuanto a presupuesto. Pero nosotros a base de sacrificio y trabajo vamos a intentar conseguir la salvación pasando los menos apuros posibles. Tenemos que dar la cara en cada partido.
¿Qué fútbol sala propondrá Eloy Alonso?
Un equipo como Zamora va a mantener la filosofía de juego que tenía cuando yo estuve aquí. Zamora es lucha, es garra, es entrega y nosotros no vamos a ser menos. Vamos a ir arriba, tenemos un equipo joven, con gente que va a venir a comerse el mundo y la categoría y vamos a ir a por todas. Saldremos a dar siempre la cara. Luego te pondrán salir las cosas o no, pero la filosofía de juego de presión arriba y no dejar jugar al rival será la que usemos en casa. La idea es que vuelvan los tiempos en los que el pabellón se convertía en un infierno y los equipos sabían que era muy complicado si quiera puntuar.
¿Ha cambiado mucho el fútbol sala desde que Zamora salió de la élite?
Sí, ha cambiado. Hubo tres años en los que el nivel de la categoría había bajado, pero ya el año pasado empezó a repuntar el nivel nuevamente y esta temporada se espera una mayor recuperación de talento y competitividad en la Segunda División. Hay equipos que por potencial económico y deportivo pueden fichar a varios jugadores de División de Honor, y eso significa que la Segunda División sigue creciendo y potenciándose.
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