Aún así, Aguirre ha asegurado que el equipo llega "con buenas sensaciones" al envite después del triunfo ante el Lealtad que "hizo bueno" el empate cosechado en Luanco: "El equipo está creciendo, pero hay que seguir trabajando para consolidar esa mejora. Ahora empieza un partido nuevo y se apaga todo lo anterior", ha explicado el técnico asturiano.
En cuanto al capítulo de altas y bajas de cara al choque, el entrenador no podrá contar todavía con Salva Rivas, aún convaleciente de su lumbalgia. Está previsto que el centrocampista andaluz se incorpore a la dinámica del grupo a lo largo de la próxima semana. Por su parte, Aarón Aguado y Alberto Prada son duda tras recibir sendos golpes durante el partido ante el Lealtad, aunque todo apunta a que estarán, al menos, en la lista de convocados de Roberto Aguirre.
El entrenador del Zamora visita a un equipo que dirigió durante una temporada. Concretamente, la ya lejana 2002-2003. "Es la primera vez que vuelvo y ha pasado ya mucho tiempo. Hay recuerdos, pero para mí es un partido más, con la dificultad de lo que es nuestro rival", ha afirmado el técnico, que también ha incidido en las virtudes del Langreo: "Lo están haciendo muy bien. Vienen de ganar en Astorga, compiten en su campo y tienen argumentos. Va a ser un rival difícil", ha concluido.
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