Más de cuatro meses después de su grave lesión de rodilla, Miguel Camino (Valladolid, 1993) volvió a correr, “más bien a trotar”, este martes. Lo pactado eran tres minutos; él lo alargó treinta segundos más. Poco a poco, su recuperación avanza, aunque no lo suficiente como para volver a verle vestido de corto con el MMT Seguros. Este sábado, el ‘28’ de los pistacho se despedirá de su gente en el Ángel Nieto de un modo que le desagrada: viendo los toros desde la barrera. Atrás quedan cinco años de crecimiento individual y también colectivo; amigos y recuerdos. Se acaba una etapa.

Pregunta La entrevista se realiza con la fuente de La Marina de fondo, el escenario donde Camino y el MMT Seguros han celebrado dos ascensos en estos años. La pregunta es clara. ¿Habrá un tercero?

Respuesta: Esperemos que sí, que sea este año, pero yo creo que, aunque sea al siguiente o al siguiente, tarde o temprano esta fuente se volverá a visitar para celebrar el ascenso a Asobal.

P: ¿Este año lo ves especialmente complicado, dadas las bajas?

R: Sí que es cierto que las bajas van a influir. No por los nombres de los jugadores que sean, sino porque dan cambios y la plantilla necesita frescura para esa fase de ascenso.

P: Antes del play off, este sábado se celebra el último partido en casa. ¿Te va a quedar clavado el hecho de no poder despedirte desde la pista?

R: Es la única espina que me queda clavada de toda mi etapa en Zamora, no poder despedirme de la afición que tanto cariño me ha dado haciendo lo que más me gusta, que es jugar al balonmano. Hacerlo aquí para mí ha sido inolvidable.

P: El partido ante el Bidasoa Irún es importante porque puede marcar dónde y contra quién jugáis en la fase. ¿Cuáles son las preferencias?

R: Si nosotros ganamos a Bidasoa, la fase es en Palma del Río y, si perdemos, habría que esperar el resultado de Ciudad Real. Nosotros tenemos el objetivo de ganar el partido porque no miramos más allá. Hay que recuperar sensaciones y la fase que sea donde tenga que ser.

TRAYECTORIA

P: Han sido cinco años, dos ascensos y un descenso. Cuando llegaste a Zamora, ¿te imaginaste que alcanzarías la Asobal con el equipo?

R: No te lo imaginas. Yo llegué con 17 años en Primera Nacional y, en tres añitos, estábamos en Asobal. Luego llegó el descenso pero, si tengo que volver a bajar alguna vez, espero que sea con el orgullo y el honor que lo hizo este equipo. Estos cinco años han sido inolvidables por esa forma de competir.

P: ¿Con qué te quedas de esta etapa?

R: Me quedo con muchas cosas, con todos los amigos que he hecho aquí y con el cariño que me ha dado toda la ciudad. No esperé que me acogieran así. El primer año fue increíble, pero los demás han sido mejores todavía. Ahora, con la lesión, el apoyo que me han dado jamás lo podré olvidar. Me quedo con el cariño.

P: Has vivido los años de mayor crecimiento del club. Del Camba al Ángel Nieto, de Primera Nacional a la Asobal. ¿También tienes esa sensación de que Zamora respira balonmano?

R: Con respeto a todos los equipos, Zamora es balonmano. Este equipo tiene enganchada a la ciudad y ya no solo por los resultados. Hay una serie de valores, como el trato a la cantera, que son la base de este equipo. Se ha visto con las lesiones, cuando lo fácil habría sido fichar a otros jugadores, la gente de la cantera está entrenando con el equipo, y en el caso de Luis, jugando muchos minutos.

P: ¿Crees que, si se hubiese fichado, tanto este año como el anterior, la situación podría haber sido distinta?

R: Está claro que, si hubiéramos fichado a Karabatic el año pasado, no habríamos bajado, pero a partir de ahí hay que valorar la situación. No te voy a mentir, está claro que hay que fichar si las condiciones económicas lo permiten, pero si no, hay que tirar con lo que se tiene.

FUTURO

P: ¿Cuándo decidiste que era el momento de cambiar de aires?

R: Ha sido este año. Yo siempre he dicho que el balonmano para mí es muy importante, pero creo que hay cosas que lo son tanto o más, como la formación académica o el trabajo. Eso aquí, para mí, se acaba y, a partir de ahí, llegaron otras cosas que también fueron mejores a nivel deportivo

P: ¿El Atlético Valladolid podría ser el destino?

R: Los rumores son rumores. Tengo alguna cosa encima de la mesa y, a partir de ahí, decidiré. En breve, se conocerá mi destino.

LESIÓN

P: La lesión te pilló en el mejor momento de la temporada. ¿Cómo fueron las primeras semanas de la recuperación?

R: Siempre he dicho que tengo que ir mejorando, creo que lo he hecho y puede que me pillara en uno de los mejores momentos de toda mi carrera. Fue bastante duro porque es un parón y una lesión bastante fastidiada. Hay que llevarla muy bien psicológicamente y trabajar mucho en la rehabilitación. Fueron dos meses complicados a nivel personal. Ahí, entre mis padres y yo lo hemos sufrido.

P: En el inicio de ese proceso, durante el partido contra Palma del Río, recibiste el cariño de la afición en el minuto 28. ¿Cómo recuerdas ese homenaje?

R: Cuando tú estás bien, la gente responde, pero cuando estás mal es más difícil y, para mí, toda la ciudad ha sido un apoyo de los más importantes en esta lesión.

P: Con el avance de la temporada, terminaste compartiendo grada con muchos amigos que también sufrieron lesiones.

R: Sí, preferiría haber visto los partidos solito. Si al principio de temporada te dicen que todos estos jugadores van a estar lesionados, no te lo crees. Además, de esta gravedad. Que se vayan dos rodillas al garete, que Octavio se rompa, lo del ojo de Jortos…

DESPEDIDA

P: Volvemos al sábado, siete de la tarde en el Ángel Nieto. ¿Esperas una despedida como la que tuvo Esteban Salinas el año pasado?

R: Ojalá, pero la gente tiene que hacer lo que le salga en ese momento. Será una despedida diferente, porque no podré estar en la pista, pero espero que sea muy bonita y que no me emocione mucho.

P: Tras este partido, también estarás en la fase de ascenso, sea en Palma del Río o en Irún. ¿Qué le dirías a la gente para que se anime a ir y a apoyar al equipo a pesar de las dificultades?

R: Hay que apoyar a este equipo como hasta ahora. Más no se puede. Estás en Asobal, llenas el pabellón; estás en Plata, llenas el pabellón… Si las condiciones lo permiten, que vayan, porque todos mis compañeros se merecen el premio de la Asobal.

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