Una cuesta, un vehículo sin motor que a la vez corra pero también tenga buenos frenos y maña, mucha maña son los ingredientes para participar y tener opciones a los premios sorteados.
La actividad comenzaba pasadas las 19.00 horas y contaba con varios vehículos. Bien sea en solitario o acompañados por otra persona los vehículos comenzaban a rodar y a evitar los obstáculos a su encuentro en el camino.
Tras la carrera se dio lugar a la entrega de premios, premio a la velocidad y premio a la originalidad.
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