Tal y como se esperaba el Viernes de Dolores se presenta encapotado y con lluvia. Y ya se sabe que el agua es el peor enemigo de las procesiones de Semana Santa y especialmente de sus tallas. En este caso, y ante la posibilidad de que llueva durante el desfile procesional, la junta directiva de la Hermandad Penitencial del Santísimo Cristo del Espíritu Santo estudia varias opciones.
Eso sí, las previsiones que manejan desde esta Hermandad apuntan a que podría dejar de llover a partir de las ocho de la tarde. Pese a ello, se están estudiando diferentes alternativas. El abad, Juan Antonio Haedo, explica para zamora24horas: “Aunque nos dicen que a las ocho puede dejar de llover la realidad es que nuestra procesión sale a la calle a las diez y media y a esa hora podrían volver a aparecer las precipitaciones. Es por eso que ya estamos estudiando posibilidades”.
Lo que tiene claro Haedo es que si llueve con intensidad la procesión será suspendida. En caso de que la lluvia no sea muy copiosa, las opciones son varias, aunque hay una que toma mucho cuerpo: “Entre todas las que estamos barajando toma más forma la de salir sin el Cristo para no poner en riesgo el patrimonio de la Hermandad. Saldríamos todos los hermanos, subiríamos hasta la Catedral para pasar por la Puerta Santa, realizar allí el acto de cada año y finalizar allí mismo el desfile procesional. Lo que tenemos claro es que el Cristo no saldrá tapado porque la humedad podría provocar daños irreparables”, apunta el abad de la Hermandad Penitencial del Santísimo Cristo del Espíritu Santo
Por lo tanto, habrá que esperar hasta última hora para conocer la decisión final de la Hermandad que, como es lógico, dependerá de la lluvia que se presente y de las previsiones que existan.
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