Triunfo sufrido. Claro que ha costado ganar al Barça. Si no nos costase ganar al Barcelona… Creo que hemos competido muy bien pese a que todos seguimos cometiendo errores en este inicio liguero. Pero hemos minimizado mucho esos errores en la segunda parte, sobre todo reduciendo mucho las pérdidas de balón. En la primera estuvimos algo más nerviosos.

Manejo de las áreas. Trabajamos bien las dos facetas, tanto la defensiva como la ofensiva. Creo que seguimos creciendo desde la defensa pero en este partido me voy muy satisfecho con el ataque aunque no hayamos metido un gran número de goles. Me voy satisfecho porque hemos jugado más balones con el pivote, hemos jugado por los extremos, hemos tenido lanzamiento exterior… En definitiva, durante los últimos días estamos trabajando mucho ese aspecto y creo que empiezan a verse los resultados aunque luego la ejecución no acabe en gol. Estamos mejorando ese aspecto a pasos agigantados.

Mejora constante. El trabajo sigue siendo la clave del éxito. El equipo trabaja mucho día tras día. Los entrenamientos son muy intensos y la competitividad cada día es muy alta. Eso favorece a todos los jugadores porque les permite mejorar y estar mucho más preparados para el día de partido.

Gran encuentro del meta Leo. La confianza siempre ha sido máxima hacia nuestro portero, desde pretemporada. De momento sus actuaciones están siendo espectaculares, pero tenemos que estar preparados por si un día deja de parar cuatro o cinco de cada diez tiros para parar tres. Le llegarán momentos malos a él y a todo el equipo, y es cuando hay que seguir apoyándoles.

La defensa, inconmensurable. El trabajo defensivo está siendo espectacular. Creo que todo es un bucle, el portero para y la defensa se motiva, y la defensa pega duro y el portero para. Es un círculo vicioso del que no queremos salir nunca. Hoy hemos defendido perfecto, con los pivotes subiendo a pegar a nueve metros y teniendo muy buenas coberturas.

Por su parte, el técnico del filial azulgrana comentaba: “Sabíamos que partido nos íbamos a encontrar pero no hemos podido sobreponernos a él. Zamora siempre pone en sus partidos un alto nivel de desorden que vuelve loco al equipo contrario. Tratamos de contrarrestarlo, pero no tuvimos eficacia. En el último tramo defendimos bien, pero arriba no estuvimos acertados. Después de tanto fallar, los jugadores estaban ansiosos y se precipitaban, y eso nos llevó a perder. Pese a todo, me voy contento porque nuestro objetivo es la formación de los jugadores y en partidos de estos es donde más crecen: un buen rival, un partido igualado y un gran ambiente”, finalizaba.

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