La temporada pasada tenía que haber sido la de su confirmación pero las lesiones le persiguieron y nada más empezar un esguince, y en el segundo partido una aparatosa lesión de su codo, hizo que se perdiera prácticamente toda la pretemporada y la primera vuelta. Aun así, consiguió mejorar sus números de la temporada pasada en todos los apartados: minutos jugados, puntos, lanzamientos... y se convirtió en uno de los puntales del primer equipo.
Aunque solo tiene 22 años, desde el club amarillo ya han confirmado que será uno de los jugadores con más experiencia en Liga EBA de la plantilla. El técnico David Barrio espera sacar el máximo rendimiento de este jugador, una vez que ya está adaptado a la categoría y a la ciudad. Además, confía en él para ser uno de los soportes de este nuevo y rejuvenecido proyecto amarillo, que poco a poco se va formando.
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