Un punto que a priori tiene poco valor. El Zamora CF no pasaba del empate este sábado en Bembibre en un duelo en el que los pupilos de David Movilla no terminaron de estar cómodos casi en ningún momento.
Pese a que la salida del equipo no fue mala, los zamoranos noeran capaces de tener profundidad, por lo que Ivanildo vivía el encuentro con tranquilidad. Una tranquilidad que vio rota Jon Villanueva en la primera llegada del Bembibre. Una jugada aislada de los locales acababa con un disparo raso al palo largo que frenaba Villanueva a córner. En ese saque de esquina, el Bembibre hacía el gol. Era el minuto quince y la pasividad de la defensa dentro del área dejó al rival en bandeja el tanto.
Con el gol, los zamoranos no reaccionaban. Es verdad que querían controlar el centro del campo pero era un dominio estéril muy lejos de la portería rival y sin apenas profundidad. En una llegada sin aparente peligro, Murci se encontraba con un balón huérfano en el corazón del área para hacer una vaselina al arquero. Lo mejor para el Zamora era el descanso. La lluvia arreciaba y los futbolistas del Zamora no se tenían en pie.
El asueto pareció venir bien a los de Movilla, que salieron de cara a por la victoria. Fue una segunda parte en la que los rojiblancos fueron superiores sin hacer un juego especialmente fluido. Pese a todo, dos tiros de Dani Hernández, tres remates de Murci o un remate de Carlos Ramos desde la frontal pusieron cerco a la portería de Ivanildo. El portero local se hizo enorme e hizo tres acciones de mucho mérito para evitar que su equipo perdiera.
El Zamora se volcó tanto arriba que tuvo un par de errores en defensa en los que el Bembibre también rozó el gol. Al final, un reparto de puntos que sabe a poco a los zamoranos y que les deja a un punto del liderato aunque con un encuentro más que la Arandina. Un punto que deberá hacer bueno el fin de semana con un triunfo ante un rival directo como es el Cristo Atlético.