Se trata de un programa impulsado desde Gijón Turismo, que se puso en marcha hace dos años y que recibe durante todo el año a grupos de estudiantes.
Los niños, que volvieron ayer a Villanueva del Campo, llegaron a Gijón el pasado martes, día 3 de junio, y visitaron el Acuario, el Museo del Ferrocarril, el Jardín Botánico Atlántico, Laboral Ciudad de la Cultura y recibieron un curso de iniciación al surf. “Con esta acción se busca descubrir nichos de mercado a travésde la población infantil, haciendo de estos infantes unos embajadores en potencia de Gijón,con lo que se espera conseguir objetivos a corto, medio y largo plazo”, indican fuentes de la organización. “A corto plazo, vacaciones de los infantes con sus familias para pasar temporadas en la época estival; a medio plazo, contando con el entusiasmo con que los pequeños van a relatar en su ámbito de influencia las experiencias vividas en nuestra ciudad, y a largo plazo, debido al grato recuerdo de la experiencia vivida en su infancia, transmitirán este entusiasmo a las generaciones venideras, consolidando Gijón como destino turístico de referencia en sus lugares de origen”, precisan.
El programa de las Semanas Náutico-Culturales consiste en combinar la iniciación y aprendizaje de deportes náuticos con la promoción turística de Gijón. Sus objetivos son promocionar la práctica de deportes como la vela, el surf, el windsurf o piragüismo entre la población infantil y juvenil, junto a actividades que descubran las bondades de la ciudad como destino turístico, a través de infraestructuras turísticas.
Este proyecto va dirigido a jóvenes que cursen estudios de primaria y ESO y que residan, prioritariamente, en zonas del interior peninsular y que no tengan acceso al mar, pero que, por proximidad, encuentren en Gijón su primera experiencia con el mismo, su playa y su puerto de referencia.